Sólo han solicitado 2 espacios para operar como estacionamiento en el FMO
MORELIA, Mich., 11 de junio de 2019.- El área de donación municipal del fraccionamiento Manuel Gutiérrez Nájera es actualmente propiedad del fraccionador del asentamiento, inmobiliaria Quiñones, por lo que la licencia de construcción de tres viviendas en el sitio, emitida por la actual administración municipal, es legítima y válida, aseveró Sergio Adem Argueta, secretario de Urbanismo y Obra Pública.
Luego que vecinos del fraccionamiento Manuel Gutiérrez Nájera denunciaran ante el gobierno de la capital michoacana la presunta venta ilegal del área de donación municipal al fraccionador original, quien recientemente arrancó la construcción de tres inmuebles en este predio, Adem Argueta señaló que comenzó la revisión de la situación en que priva en el lugar.
Si bien esta labor no ha culminado, detalló que se detectó que durante la gestión de salvador López Orduña como presidente municipal de Morelia se aprobó la instalación del fraccionamiento Manuel Gutiérrez Nájera, con la asignación de áreas verdes estatal y local.
Posteriormente, en circunstancias que no han sido aclaradas, aunque no necesariamente son irregulares, el ayuntamiento de Morelia vendió al fraccionador el área de donación municipal, en un monto por establecer y con un destino de los recursos recabados por esta vía por definir.
“Estamos estudiando bajo qué condiciones sucedió eso, porque aún no lo sabemos, sucedió hace cuatro administraciones y estamos en la integración de un expediente para explorar la problemática, ya que no es común y hoy no se hace, la venta de patrimonio del municipio”, reiteró.
Así, la inmobiliaria Quiñones tiene la legítima propiedad y posesión del predio reclamado por los vecinos, por lo que la gestión local 2018 a 2021 no tuvo impedimento en otorgarle una licencia de construcción para tres viviendas en el terreno de referencia.
Cuestionado en torno de la normatividad que regula la comercialización de patrimonio del municipio, Sergio Adem aseguró que se cuenta con lineamientos en la materia, sin exponerlos, a la vez que aseguró que se habría requerido de un consenso o acuerdo del Cabildo entonces en funciones, “quizá para efectuar obra pública” o solventar alguna necesidad del gobierno capitalino.
Agregó que el fraccionamiento Manuel Gutiérrez Nájera, contrario a lo expresado por vecinos del asentamiento, no es un coto privado, por lo que no tiene facultad de cierre, bardeado o colocación de portones que limiten el ingreso, en tanto que se desconoce al momento si ha sido entregado o no al municipio.
Detalló que se prevé una reunión con los involucrados para escuchar sus aportaciones y delimitar sus derechos y obligaciones, a fin de evitar un conflicto vecinal; no se ha estipulado una fecha tentativa para la definición de una resolución respecto del reclamo de los propietarios de viviendas en el asentamiento mencionado.
Recordó que desde septiembre de 2018 no se han emitido autorizaciones de nuevos desarrollos habitacionales, aunque sí se han recibido solicitudes de fraccionadores para intervenir predios.
En estas peticiones, el secretario de Urbanismo y Obra Pública manifestó que se ha verificado que los fraccionadores destinen las áreas de donación correspondientes al régimen de la propiedad, además de que éstas se orienten hacia los accesos de los asentamientos, para maximizar el impacto positivo de las áreas de donación.
Residentes del fraccionamiento Manuel Gutiérrez Nájera dieron a conocer su inconformidad con la construcción de tres viviendas en el área de donación municipal del sitio, el cual, acotaron, fue vendido de forma presuntamente ilegal al fraccionador original por parte del propio ayuntamiento de Morelia, en perjuicio de los colonos.
A esta queja se suman la incertidumbre sobre la municipalización del fraccionamiento y el derribo de la barda perimetral, para facilitar el ingreso de la maquinaria requerida para la construcción de las viviendas proyectadas.