MORELIA, Mich., 24 de julio de 2019.- En el primer cuadro de Morelia se contabilizan 167 viviendas monumentos históricos en abandono, de acuerdo con la Coordinación del Centro Histórico.

De este universo, 53 inmuebles se localizan en el sector República; 43, en el sector Revolución; 38, en el sector Independencia, y 33, en el sector Nueva España.

Si bien la instancia especificó que estas viviendas no están bajo la responsabilidad del Gobierno municipal, “están documentadas como arquitectura doméstica austera y como rasgo de identidad de la zona, construida con materiales regionales de tabique, madera, piedra, argamasa y terrados, por lo que constituyen parte esencial del paisaje urbano de la zona de monumentos de la capital michoacana”.

Asimismo, omitió especificar el grado de deterioro que enfrentan las construcciones y el riesgo que representan para la población y la infraestructura pública adyacente.

De acuerdo con la Coordinación del Centro Histórico, aunque la preservación de estos sitios es responsabilidad de sus propietarios y debe estar bajo la revisión del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), el ayuntamiento de Morelia abrió una ventanilla para la atención de los particulares que precisen de asesoría y acompañamiento para la realización de trámites y la elaboración y ejecución de planes de restauración o intervención, sin que se detalle la proporción de ciudadanos que ha recurrido a este servicio.

Entre las vialidades donde se concentran las viviendas patrimonio cultural en condiciones de abandono, destacan la calle Guerrero, con seis inmuebles; Nicolás Romero, ocho; Primero de Mayo, ocho, y Fray Bartolomé de las Casas, Mariano Elízaga y Virrey de Mendoza, con cuatro construcciones cada una.

El abandono que enfrentan inmuebles monumentos históricos en manos de particulares genera una mayor posibilidad de pérdida de este patrimonio, como fuera el caso de la vivienda sita en la calle Plan de Ayala, esquina con Miguel Silva.

Esto, debido a la falta de mantenimiento, que llevó a la saturación de cubiertas y muros por las lluvias intensas recientes y una limitada estabilidad por el daño de los materiales con que fuera construido.