Denuncian comerciantes del Centro presunta afectación por obras

MORELIA, Mich., 12 de abril de 2017.- A pesar de que el principal argumento para justificar la implementación del proyecto de peatonalización del Centro Histórico en su primera etapa fue la mejora de los ingresos de los negocios de la zona y una mayor seguridad, la realidad para establecimientos restauranteros ubicados en las inmediaciones del Jardín de las Rosas ha sido justamente la opuesta, alertó Gloria Lázaro, gerente de La Casona de las Rosas.

Localizado en las cercanías de las calles El Nigromante y Miguel Bernal Jiménez, dos de las siete vialidades a intervenir a través del cierre del paso de automotores, el Jardín de las Rosas se ha visto afectado por la intensificación de la comisión de delitos como el robo a transeúntes y a negocios, donde han resultado particularmente impactados restaurantes, bares y cafés del área, así como trabajadores de estos.

De acuerdo con Gloria Lázaro, aunque no se tienen números precisos de la actividad criminal, debido a que no todos los eventos culminan en denuncias penales, de un estimado de un robo a transeúnte o negocio que se observaba en la zona se ha transitado a tres robos a negocio y cuatro a transeúnte en las últimas tres semanas.

Agregó que desde enero de este año, poco después del inicio de los trabajos de peatonalización y el cierre de vialidades a la circulación de automotores, se ha detectado una tendencia al alza en la inseguridad pública en las inmediaciones del Jardín de las Rosas. Tan sólo en las últimas semanas, han sido atracados dos negocios, uno de ellos en dos ocasiones consecutivas, y cuatro trabajadores han sido víctimas de asalto con arma blanca, además de que se prevé que de 10 negocios hasta ocho han experimentado en sus instalaciones o en su personal eventos delictivos.

Entre las causales que consideran han desencadenado esta situación, Gloria Lázaro mencionó que los policías de proximidad sólo operan de 9:00 a 21:00 horas, pese a que es a partir de las 00:00 horas que se requiere de una mayor presencia policíaca para que clientes y trabajadores tengan seguridad en su retiro; la ausencia de rondines en las primeras horas del día, lo que facilita que los criminales dispongan de tiempo para la eliminación de cámaras de seguridad de los comercios y la realización de boquetes en las puertas para ingresar, y la permanencia de materiales de construcción en las calles intervenidas, que proveen de sitios de escondite adecuados para los delincuentes y reducen la percepción de seguridad de los paseantes.

Aseveró que el gremio considera que el proyecto de la peatonalización es bueno y favorece la atracción de turistas; no obstante, se encuentra mal ejecutado, ya que se han descuidado aspectos importantes, como lo es la seguridad.

Detalló que al momento no se ha percibido, pero la propuesta dejó de lado la instalación de accesos para los servicios de emergencias, como ambulancias y patrullas policiales: “Se está proyectando una captación turística mayor, pero descuidan la seguridad, así que quieren traer gente, pero qué vas a proyectar, que te asaltan”, cuestionó Gloria Lázaro.