MORELIA, Mich., 17 de febrero de 2019.- Un presupuesto por alrededor de 279 millones de pesos posee el ayuntamiento de Morelia al momento, destinado a solventar la problemática de inundaciones y encharcamientos severos en el municipio, refirió Raúl Morón, alcalde de la capital michoacana.

Expuso que los ahorros y las economías que ha generado el gobierno municipal por la adecuación de las condiciones contractuales y laborales de los trabajadores del Organismo Operador del Agua Potable, Alcantarillado y Saneamiento (OOAPAS) y otras instancias alcanzaron un monto de 100 millones, que se utilizarán en la realización de obras hídricas y de redes de drenaje para reducir el riesgo de inundaciones en las zonas más proclives a estos fenómenos.

Además, se tienen los recursos otorgados por la Federación, a través del Fondo Nacional de Desastres Naturales (Fonden), para la implementación de obras que mitiguen inundaciones y encharcamientos, por un total de 179 millones de pesos.

No obstante, se prevé el arribo de otros recursos, como los correspondientes al ramo tres y financiamiento estatal, los que se encuentran en proceso de gestión, con sumas por determinar.

Raúl Morón destacó que una vez que quede conformado el programa anual de inversión (PAI) para el ejercicio 2019 se conocerá con precisión el presupuesto que se usará en la infraestructura y las acciones requeridas para reducir la incidencia de inundaciones y encharcamientos severos, especialmente durante la temporada de lluvias.

Esto, para dar cumplimiento al compromiso establecido por el ayuntamiento de Morelia, luego de las lluvias e inundaciones que se registraran en 2018 en el municipio, que afectaran a 43 colonias en la capital michoacana y dejaran cerca de dos mil familias damnificadas.

Agregó que el OOAPAS y las secretarías de Desarrollo Rural y Medio Ambiente, Urbanismo y Obras Públicas y Servicios Públicos tienen la encomienda de instrumentar las medidas pertinentes para que esta temporada de lluvias, que se espera iniciará hacia el mes de junio.

Será hacia los meses de marzo y abril cuando comiencen los trabajos de las obras de infraestructura y servicios para abatir la posibilidad de que la población enfrente estos fenómenos.