Tengo a salvo mis derechos, revira Yankel al Ejecutivo
MORELIA, Mich., 14 de febrero de 2018.- No podemos negar que persiste la injusticia social en el país, la que combatieron los próceres de la Independencia nacional y que ahora debemos combatir, afirmó Germán Rodrigo Martínez Ramos, director de Asuntos Interinstitucionales y de Cabildo, durante la ceremonia conmemorativa del 187 aniversario luctuoso de Vicente Ramón Guerrero Saldaña.
El orador oficial del acto conmemorativo, ante Alberto Frutis Solís, titular de la Secretaría de Educación en el Estado (SEE); Gerardo Mérida Sánchez, comandante de la 21 zona militar, y Alfonso Martínez Alcázar, alcalde de Morelia, destacó que la actividad como arriero que desde niño emprendiera Guerrero Saldaña le dotó de un conocimiento cercano de las condiciones de desigualdad e injusticia social que entonces detonaron la justa independentista, y que a más de dos centurias de distancia aún siguen vigentes en el país.
“El enemigo ahora no es un extranjero opresión, es peor, porque somos nosotros mismos. La sociedad mexicana no termina de reconocerse como una sola, plural, estamos hundidos en traumas sociológicos e ideológicos y secuestrados por un sistema político asfixiante, donde el pueblo está harto de no ver cumplidos sus anhelos fundamentales”, explicó Martínez Ramos.
Aseveró que el país requiere seguir un rumbo “ajeno a los intereses que nos tienen postrados en el atraso, algo que sólo lograremos encendiendo la convicción de independencia, la esperanza y sabernos descendientes de una raza de héroes que nos legaron libertad, pero también la responsabilidad de la justicia social”.
Germán Rodrigo Martínez expuso que el único insurgente que se mantuvo invicto se entrevistó, luego de un intercambio epistolar, con Agustín de Iturbide, militar realista, para culminar con el abrazo de Acatempan y el Plan de Iguala la lucha por la independencia de México sobre los pilares de la religión, la independencia y la unión nacional.
Tras asumir la presidencia del país en 1829, Vicente Ramón Guerrero impulsó la edificación y operación de escuelas públicas, una reforma agraria favorable a los campesinos, la reactivación de la industria y la puesta en marcha de un centro nacional de atención a inválidos de la guerra, entre otras ideas de corte liberal.
No obstante, Guerrero Saldaña fue víctima de las vicisitudes que vivió México en sus primeros años como nación soberana y por órdenes del presidente Anastasio Bustamante, fue apresado, trasladado a Huatulco, donde un consejo de guerra le condenó a muerte y fusilado en 1831.
La historia nacional reconoció el aporte que efectuara el que ante su padre, portador del indulto de España para Guerrero Saldaña, aseguró que “la patria es primero”, pero es menester que en la actualidad su legado continúe en la lucha contra la injusticia y la desigualdad de la sociedad, mencionó Martínez Ríos.