Urge incorporar políticas públicas para prevenir sequía en Morelia
MORELIA, Mich., 18 de febrero de 2015.- Es miércoles de ceniza y para la fe católica es la oportunidad de buscar la reconversión espiritual y llevar una vida cristiana, lejos de individualismos y con cercanía a Dios a través de acciones de caridad, solidaridad, sacrificio y penitencia.
Desde muy temprana hora, cientos de fieles católicos arribaron a los Templos de la Iglesia Católica para celebrar la eucaristía y tomar ceniza, como ya es una costumbre, principalmente inculcada de padres a hijos, aunque pocos conozcan el significado de tal acción.
“Arrepiéntete y cree en el evangelio” expresa el sacerdote al mismo tiempo de formar una cruz con ceniza sobre la cabeza de cada uno de los creyentes católicos, lo que significa que una vez iniciada la cuaresma, es tiempo de llevar una vida más cristiana, “de hacer un proceso de purificación que engrandezca como ser humano a los fieles creyentes”, dijo el obispo auxiliar de Morelia, Juan Espinoza Jiménez.
El jerarca católico fue el encargado de celebrar la primera misa del miércoles de ceniza en la catedral de Morelia, desde ahí hizo un llamado a no perder el sentido de la cuaresma, que no sólo se trata de ayunar y abstenerse a comer carne los viernes, si no a vivir como un cristiano caritativo, pendiente de la voz de Dios.
Con túnica morada y ante un altar austero, comparado con otras épocas del año, en la que predominan los arreglos florales y los adornos dedicados a todos los santos, el obispo auxiliar de Morelia reconoce que la costumbre católica se ha ido perdiendo, principalmente por el bombardeo cultural que invita a la gente a ser individualista y a buscar bienestar para sí mismo sin pensar en los demás.
Por tal motivo, subrayó el llamado a los feligreses para que durante los próximos 40 días, que anteceden a la fiesta de Pascua, lleven a cabo un sacrificio o una pequeña penitencia que invite a la humildad y a demostrar la grandeza del ser humano.
La invitación del jerarca católico es escuchada por los fieles católicos quienes siguen la costumbre de cada miércoles de ceniza acudir a escuchar la palabra de Dios a través de la eucaristía, sin embargo reconocen que poco saben sobre su significado.
María Luisa Gamiño, Manuel Martínez, Héctor Leal y Gabriela Serna señalaron a Quadratín que año con año acuden a recibir la cruz de ceniza sobre sus cabezas, primero porque es una costumbre inculcada por sus familiares y después, por el gran sentimiento de tranquilidad y paz interna que deja el acercamiento con Dios en el Templo.
Reconocen que hacer los sacrificios de abstinencia en muchas ocasiones están impedidos de realizarla por las condiciones de salud que muchas veces son complicadas, sin embargo consideraron importante aprovechar la cuaresma para hacer momento de oración y reflexión que permitan cambiar los aspectos malos de cada una de sus vidas.