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MORELIA, Mich., 16 de junio de 2014.- Una multa por el monto del daño causado e incluso prisión de dos a 10 años son las sanciones que pueden aplicarse contra quienes colocaron una exposición fotográfica sobre el Acueducto de Morelia, informó el historiador michoacano Arturo Herrera Cornejo.
En entrevista, tras observar la serie de imágenes que se colocaron en el monumento histórico, considerado Patrimonio de la Humanidad, el especialista en Historia señaló que cualquier manera que se haya utilizado para fijar las gráficas representa un daño a la obra arquitectónica cultural.
“Al usar algún tipo de pegamento, se causa un daño importante al cantera, si utilizaron clavos, el problema es peor” puntualizó Arturo Herrera quien precisó que el artículo 52 de la Ley Federal sobre Monumentos y Zonas Arqueológicas, Artísticas e Históricas, establece claramente las sanciones al respecto.
Aclaró que para que se haya colocado tal exposición, el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) tuvo que haber autorizado, sin embargo, en dado caso de que exista una aprobación, la propia dependencia federal estaría violentando la normativa federal, misma que establece que también los funcionarios responsables de aplicar la Ley pueden ser sancionados.
“Si es indebido, hay una violación clara a la Ley al ponerla sobre el Acueducto, yo creo que la podrían haber colocado fácilmente sobre la Calzada San Diego, el Acueducto es un monumento emblemático en Morelia y hay normatividad que se tiene que respetar” puntualizó.
El historiador señaló que pudiera ser comprensible que en tiempos del Mundial de futbol, considerado un deporte popular, se generen este tipo de ideas, sin embargo fijar exposiciones, como en el caso del Acueducto, lastiman el monumento histórico.
De acuerdo a Herrera Cornejo, el Acueducto de Morelia fue fundado en la antigua Valladolid con la finalidad de acercar el agua al centro de lo que ahora es la ciudad.
Finalmente, señaló que fue el Obispo Fray Antonio de San Miguel, a finales del siglo 18, quien lo mandó reconstruir para quedar como está en la actualidad, debido a que en ese tiempo se registró una hambruna por una fuerte sequía en la ciudad, por lo que el Acueducto además de convertirse en un monumento, tenía una función de servicio para la población.