Divorcio entre gobierno estatal y sociedad, apunta Alfredo Castillo

MORELIA, Mich., 16 de enero de 2013.- Lo que hemos visto en Michoacán es que existe un divorcio entre las instituciones de gobierno y la sociedad que es urgente resolver, por lo que el objetivo principal de la Comisión para la Paz, la Seguridad y el Desarrollo Integral de Michoacán “es recuperar la confianza en las instituciones del Estado Mexicano”, aseguró esta mañana el comisionado, Alfredo Castillo Cervantes.

En entrevista en la primera edición de Noticias MVS, el funcionario señaló que sus funciones consistirán en vincular y coordinar las acciones de las diferentes instituciones del Gobierno Federal, a fin de asegurar la restitución del tejido social, que se encuentra sumamente deteriorado, reconoció.

Desmintió que su presencia en la entidad sea para sustituir en los hechos las funciones del gobernador del estado, Fausto Vallejo Figueroa o para sustituir funcionarios de la administración estatal.

Aseguró que su presencia en Michoacán obedece a asegurar el apoyo integral de la Federación al Ejecutivo estatal, y desmintió que entre sus objetivos esté la sustitución de los mandos estatales de la seguridad pública.

“Del Secretario de Seguridad Pública (el general Alberto Reyes Vaca) tengo muy buenas referencias”, aunque advirtió que en el caso de la Procuraduría General de Justicia del Estado se evaluará el desempeño de mandos medios y superiores.

Castillo Cervantes reconoció que entre 2005 y 2007 “se integró a elementos nocivos a la Policía Federal, lo que ocasionó abusos que generaron rechazo a la policía y apoyo a la Familia michoacana”, que en un principio fue aceptada por la sociedad que no los veía como criminales, dijo.

En este sentido, el comisionado destacó que en un principio “la sociedad les daba información, los apoyaba y hasta realizaba algunas operaciones en su favor, pues no los veía como criminales”.

Castillo Cervantes aseguró que los integrantes de la Familia Michoacana comenzaron a reclutar, capacitar y adoctrinar jóvenes de Apatzingán, y no los puso en operación hasta que tuvieron la fuerza necesaria para sacar a los Zetas. “En un principio eran una especie de autodefensas que operaban contra los Zetas”, dijo el funcionario.

“Estos jóvenes fueron capacitados, adoctrinados por Nazario Moreno, que era ampliamente conocido. Él apoyaba a los adictos y hacía cierta labor social. Posteriormente manejaron el tema de expandirse a los estados vecinos para evitar acoso de los Zetas”, explicó.

En 2007, abundó Castillo Cervantes, “se empiezan a dar abusos por parte de la Policía Federal, lo que ocasionó el rechazo a la policía y el apoyo a La Familia. Por ello, “es probable que en ciertos grupos haya desconfianza de la policía, especialmente en las zonas remotas. La construcción social que generas en la población es una especie de anti estado, por lo que requieres reconstruir el tejido social y revertir la situación urgentemente.

Por ello, la presencia en Michoacán del comisionado va a ser permanente, “hasta que se resuelva la situación y el gobierno michoacano cuente con sus propias fuerzas de seguridad debidamente capacitadas y acreditadas, aunque ello nos lleve años”, concluyó el nuevo zar michoacano.