Roba vehículo, choca, se mete a una casa y dispara a policías, en Morelia
MÉXICO, DF., 21 de noviembre de 2013.- Para extorsionar, la delincuencia organizada no discrimina credos.
De acuerdo a una nota de Reforma, ante el acoso, pastores bautistas han cerrado templos; los anglicanos, han resistido la presión del cártel de La Familia y los evangelistas refieren el cobro de cuota, secuestros exprés de sus pastores o familiares.
Rebeca Montemayor, ministra de culto de la Iglesia Bautista, contó que en Matamoros algunas iglesias han tenido que llegar a acuerdos sobre el monto de la cuota para que los diferentes cárteles no los molesten.
“En otros casos sí han cerrado porque la comunidad ha decidido que no quieren hacer eso”, aseguró.
Entrevistada tras un encuentro organizado por el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred) y la Universidad del Claustro de Sor Juana, refirió que no tienen un registro puntual de agresiones, aunque aseguró que el hostigamiento es frecuente.
La extorsión, afirmó, se ha registrado principalmente en Tamaulipas, Michoacán y Nuevo León.
Arturo Carrasco, presbítero anglicano, aseguró que su comunidad es víctima de acoso, principalmente en Michoacán y el Estado de México.
“La Familia ha exigido que se le pase una cuota periódica, a lo que no hemos accedido y la situación ha sido muy tensa”, dijo.
La violencia, señaló, los ha obligado a reforzar sus medidas de seguridad, como cuando el Arzobispo de Canterbury, Justin Welby, máxima autoridad de la Iglesia Anglicana, visitó México en agosto.
“La condición que el Consejo Británico en México nos impuso fue que se trasladara en un auto blindado porque el encuentro fue en Monterrey, por seguridad”, mencionó.
Entrevistado por separado, Óscar Moha, coordinador nacional de la asociación civil A Favor de la Libertad Religiosa señaló que pastores y comunidades evangelistas han sido víctimas de la extorsión, principalmente en Michoacán, Chihuahua, Durango y Coahuila.
“En Durango ha habido dos secuestros exprés, uno a un pastor y a la hija de otro pastor. No ha habido denuncia formal por temor”, aseguró.
Y en Chihuahua, dijo, la familia completa de la sobrina de un pastor tuvo que migrar definitivamente a Estados Unidos tras el secuestro y rescate de ésta.
“En Michoacán a las iglesias, grandes o chicas, es decir, que tienen entre mil y 200 fieles, ya les piden una cuota mensual y les mandan a una persona a cobrar puntualmente”, narró Moha.
“En Coahuila, varios pastores han recibido como donativo vehículos de Estados Unidos y van seis a quienes se los quitan en la carretera”.
La delincuencia organizada en Michoacán, Tamaulipas, Nuevo León, Durango, Chihuahua, Coahuila y Estado de México no ha dejado fuera de la extorsión y el secuestro a quienes profesan religiones distintas a la católica.