Polo Polo, un maestro de la comedia: Alan Estrada

MORELIA, Mich., 26 de enero de 2023.- “Se murió el rey y no va a haber nadie como él”, señaló el comediante Alan Saldaña, respecto a la reciente muerte de Polo Polo. 

El as de la comedia indicó que el fallecimiento del comediante deja un lugar que nadie podrá llenar.

“Nos dejó el camino y la base para que muchos de nosotros estuviéramos aquí, aprendimos de sus chistes, aprendimos los que no teníamos un maestro que nos enseñara la comedia, cuando quisimos incursionar en esto lo vimos a él, igual como vimos a Teo González, a Jojojorge Falcón, infinidad de comediantes que nos apoyaron para que estuviéramos aquí”, expuso.

El comediante regiomontano, quien se presenta en Morelia este jueves, manifestó que ahora los actuales comediantes ya han generado sus propias dinámicas y sus propias rutinas de comedia, pero todos los comediantes de antes fueron su apoyo.

“Se fue el rey y no a ver quién llene su lugar, nos dejó mucho, la mejor forma de homenajearlo es hacer lo que mejor sabemos hacer; hacer reír a la gente”, expuso. 

Sobre si otros tiempos fueron mejores en la comedia, idea señalada por distintos comediantes que tuvieron fuerza en los 80’s y 90’s, Alan Saldaña aseveró que se ha generalizado la comedia con el stand up, y ha sido diferente, porque es solamente una rama de la comedia, al igual que los imitadores o los ventrílocuos. “El chiste es hacer reír a la gente”, acotó.

Mucho de hacer comedia hoy en día radica en los principios que tiene cada uno, o lo que uno es para hacer su propia comedia, indicó, y en este sentido reiteró la idea de que es un error contraponer o igualar la comedia con el stand up. “Nosotros manejamos un estilo de hacer comedia, la opinión de nosotros sobre la vida, sobre las situaciones diarias, y creo que también Polo Polo metía eso en sus chistes, Teo González también hace lo suyo, indicó.

Dijo que de ahí a que alguien rebase los límites, es otra cosa, porque sí es importante cuidarlos, y ya es tarea de cada uno. “Yo tengo chistes que a veces son muy buenos, pero, si creo que van a ofender a alguien, los quito, por mis principios y por mi forma de ser, pero hay comediantes que sí los avientan, es muy respetable, y cada público también decide qué quiere ver y qué consume, así que cada quien tiene su estilo, sería un error mezclarlos”, indicó.

Sus límites básicamente son no herir susceptibilidades o no ofender al público. “Tengo la habilidad de crear mis propias rutinas, y así de modificarlas para que yo me sienta a gusto en el escenario y conseguir el objetivo; que la gente viva una experiencia mágica, que se relaje, transportarla otro lugar y sacarla de sus problemas, y ofendiendo la no es la acción, así que ese es mi límite”, señaló.