Rinde homenaje Nurío a la mazorca

MORELIA, Mich., 4 de octubre de 2018.- Como una medida de resistencia cultural y cuidado a su propia cultura, la comunidad de Nurío del municipio de Paracho, realizará del 10 al 13 de octubre la Feria de la Mazorca, para rendir homenaje al grano que ha mantenido por siglos a las comunidades originarias, señalaron sus organizadores.

Tras un retraso de más de una hora por distintos incidentes, los organizadores de la feria realizaron una rueda de prensa en las instalaciones de la Secretaría de Turismo de Michoacán, donde manifestaron la importancia de este evento para la comunidad, que año con año está a la espera de que ocurra, ya que el 100 por ciento de la comunidad adulta se dedica al cultivo de maíz.

El profesor Manuel Torres, del Concejo Comunal de Nurío, quien primero habló en lengua puré, externó que a la fiesta de la feria de la mazorca es esperada año con año por la comunidad, porque saben de la importancia que tiene la mazorca, no sólo en su comunidad sino en todo México.

Un producto que se cultivó en Mesoamérica, dijo, “y Mesoamérica es Nurío, es Paracho, es el estado de Michoacán y es es México, el que regaló este grano a todo el mundo entero”. Manifestó que ante esta circunstancia es lógico celebrar esta fiesta y esta feria, “nosotros somos el maíz y el maíz es nosotros, los purépechas”

A su vez,  Bethoven González Moreno, integrante del Concejo Comunal, dijo que se le rinde una festividad al grano que ha adornado las mesas por mucho tiempo que alimentado al pueblo de México por lo que desde el día 10 al 13 de octubre la comunidad de Nurío le realiza su fiesta, con la finalidad de reconocer y entender la situación que han atravesado las comunidades indígenas durante su existencia y hasta la actualidad.

Explicó que el grano ha ayudado a mantener la cultura y la resistencia tras la conquista y el dominio español durante La Colonia, “y hoy en este fenómeno político que estamos atravesado, también mantenemos nuestro maíz, seguimos defendiendo el maíz criollo propio de nuestras comunidades indígenas”, señaló, y dijo que de esta manera también  resisten ante la amenaza transgénica de otros granos.

El mensaje que quisieron transmitir es un compromiso social con la naturaleza, ya que denunciaron que el grano se está convirtiendo en un químico en vez de ser un alimento. También el cambio de uso de suelo y otro tipo de prácticas han mermado los cultivos, “una generación nuestros abuelos en vida llegaba a los 120 años, ahora preparamos los ataúdes para los 60 años”.

Bethoven González manifestó que enfrentan dos problemas básicamente por el uso del suelo; el primero tiene que ver con que el frío de la región que mantiene un maíz más resistente y al cambiar el uso de suelo genera un maíz más débil. La segunda consecuencia es, dijo, que cada vez se reduce más el agua que necesitan para los cultivos y además el agua potable.

En la rueda de prensa manifestaron que la variedad de colores en maíz es de nueve. Además indicaron que se pueden enviar a Canadá sobre 50 toneladas de maíz, pero que no todo se envía a ese país, algunos granos solo los llevan a pueblos vecinos, porque algunos de ellos no producen maíz y necesitan comer.