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MORELIA, Mich., 1 de septiembre de 2020.- La Antología de Poesía Sembrando palabras, mujeres poetas en Michoacán, fue presentada, la cual seguramente pasará a la historia, ya que es de las primeras veces para las mujeres en el estado que se recopila un trabajo así, señaló una de las compiladoras, la poeta Rocío Martínez.
Durante la presentación, realizada en la casa taller Alfredo Zalce, donde estuvo Claudio Méndez, secretario de Cultura de Michoacán, la poeta relató que la antología fue un resultado de un trabajo que inició con la también poeta Nayeeli Ocampo a partir de un sueño y de una mañana de café, donde se tomó la decisión de hacer algunas cosas en beneficio de las escritoras.
Dijo que, en esa mañana, Nayeeli recordó que en la mayoría de las antologías se recopila el trabajo de los poetas, pero en poca medida lo hacían con las mujeres.
Esa inquietud de la poeta, aunada a su propia inquietud, ya que lleva muchos años haciendo encuentros de escritoras, escritores y veladas poéticas, les unió para llevar a cabo cuatro cuentos de escritoras en Michoacán. Dijo que se realizó el primer encuentro en el contexto de una feria del libro por la revolución cultural. En esa ocasión, se reunieron 20 escritoras y a partir de entonces se animaron a hacer el segundo encuentro, donde reunieron más de 30 en la Casa de la Cultura de Morelia.
Al ver que se reunían cada vez más mujeres, hicieron el tercer encuentro en el Centro Cultural Universitario, donde se reunieron más de 50 mujeres en los ámbitos de la poesía, la narrativa, la dramaturgia y cantautoras. Recordó que fue una semana en la que se pudieron escuchar las voces de las mujeres con esa oportunidad que no se había tenido en otro momento en Morelia.
Ya por el cuarto encuentro de escritoras en Michoacán, organizado también junto a Nayeeli Ocampo, lograron reunir a más de 70 escritoras, lo que evidenció la vialidad de un proyecto como el que estaban haciendo.
Reconoció que en cada uno de los encuentros, aunque fueron realizados por mujeres, hubo también el apoyo y el acompañamiento de compañeros solidarios, hombres conscientes y valiosos. Este acercamiento con los hombres, dijo, derivó en que para el cuarto encuentro de mujeres escritoras se llevara a cabo un comité de selección de la obra.
Este comité, dijo, está integrado por ella, por Nayeeli Ocampo, por Marco Antonio Regalado y Alberto Portillo, donde hicieron una selección de las escritoras que participarían para este cuarto encuentro. De esta selección, dijo, además del trabajo de Rosario Herrera Guido y Nayeli Ocampo, y el apoyo de la Secretaría de Cultura de Michoacán, es que tienen ahora ya la antología Sembramos palabras, un trabajo inédito en el estado.
Por su parte, Nayeli Ocampo resaltó que estos encuentros son un esfuerzo compartido con un equipo de personas que estuvo ayudando y abrigando el proyecto que nació como una iniciativa muy íntima y muy personal, a raíz de la revolución de diversas antologías y también a raíz de la lectura de la propia realidad.
Encontramos que Michoacán y Morelia es destino de poetas, dijo, pero también es decisión de poetas. “Habremos de recordar también los festivales internacionales de poesía que ha albergado nuestra ciudad”, expresó y dijo que justamente en una revisión de estas antologías encontraron que en los volúmenes se recogía gran cantidad de materiales, pero en su mayoría había solo voces de varones.
Haciendo una lectura de realidad, dijo, veían que en Morelia, en general en todo el estado, hay diversos grupos en los que la voz de la mujer está retomando una fuerza muy importante, lo que quiere decir que las mujeres son muy prolificas, no sólo en el campo de la poesía, aseguró.
Ante la gran cantidad de grupos que mostraban el trabajo de mujeres, se revisó que había una gran diversificación, y a raíz de entonces vieron que era necesario agrupar y brindar un espacio para que las mujeres pudieran, no sólo visibilizar su trabajo, porque se encontró un sesgo como que había sido borrado de la historia de la literatura, sino también proporcionar un espacio para las escritoras, desde la narrativa de la poesía, de la dramaturgia, y de las cantautoras, entre otros géneros. Distintos artistas se fueron integrando a los trabajos del encuentro, incluso mujeres pintoras.
Dijo que para participar, se abrió una convocatoria para que toda aquella escritora que quisiera entrar, lo hiciera, y fue tan importante la convocatoria que enteraron escritorias no sólo del interior del estado, sino que también llegaron de otros estados de la República, y se convirtió en una celebración y una fiesta de la palabra de la mujer, materializada, que además también se convirtió en un diálogo.
A su vez, Rosario Herrera Guido señaló que ella estuvo participando en varios de los foros, y le pareció una convocatoria muy abierta y muy saludable para la comunidad, no sólo de las mujeres sino en general para la comunidad cultural. Tiene, dijo, una apertura en edades y en otras características, “porque hoy padecemos más que nunca ese problema de la inclusión en todos los ámbitos, y tiene que ver con una sola cosa, con aceptar la diferencia”, aseveró.
Este problema, señaló, nos lleva a lo étnico, a aceptar la diferencia de colores, de culturas, lleva incluso a la diferencia de pensamiento político, y a las maneras de ver el mundo y sentirlo, las sensibilidades; “creo que todos los problemas que padecemos los seres humanos desde nuestra aparición en este maravilloso y enigmático planeta, han sido problemas de diferencias”.
Herrera Guido dijo que entró como ‘bateadora emergente’ al proyecto, esto para evitar los conflictos de intereses que podría tener Nayeli Orozco, ya que ella es parte del Consejo Editorial de la Secretaría de Cultura de Michoacán y ella no podía aparecer como coordinadora, porque eso lo prohíbe el reglamento, dijo.