MORELIA, Mich., 29 de junio de 2018.- La Orquesta y Coro de la Transformación Miguel Bernal Jiménez es parte de un programa de responsabilidad social del Festival de Música de Morelia (FMM), y ante este reto tiene sus propias necesidades. Las donaciones que recibe este programa ayudan a la continuidad de la propia orquesta, las necesidades inmediatas ascienden a 2 millones 600 mil pesos.

La Orquesta y Coro de la Transformación lleva cuatro años de historia, nacida en  2014 de la mano de la Asociación Jóvenes Mexicanos en Movimiento. Actualmente este proyecto tiene 175 miembros que oscilan entre las edades de cuatro y 18 años de los cuales 73 pertenecen al coro, 38 de ellos tocan violín, 16 viola, tres bajo, 12 cello, 10 Aliento y 23 percusión.

El proyecto tiene un impacto en 175 beneficiarios directos, es decir, los propios niños y jóvenes miembros; y un impacto indirecto en aproximadamente mil 500 beneficiarios entre sus familias y la comunidad de Jesús del Monte, donde se desarrolla la orquesta y coro.

Según la información sobre el programa musical, éste ayuda a la transformación del tejido social, a la prevención de la delincuencia, a la estabilidad económica a mediano y largo plazo, al fomento de valores, a la creación de vínculos afectivos, a generar un sentido de orgullo de pertenencia, a generar nuevas oportunidades y a fomentar la inclusión, disciplina y liderazgo.

La orquesta y coro también cuenta con un programa académico donde cada niño y adolescente recibe un aproximado de 20 horas de clases semanales con profesores debidamente calificados en materias como clases de instrumentos, solfeo, clases de coro, entrenamiento auditivo, y sesiones ‘tutti’, es decir con orquesta completa.

Las necesidades inmediatas tienen que ver con la continuidad de la orquesta y coro, lo cual tiene un costo aproximado de un millón 500 mil pesos al año; también con la compra y mantenimiento de instrumentos que llevaría a un costo de 100 mil pesos anuales; y el mejoramiento de las instalaciones, lo cual podría generar un gasto de un millón de pesos.

En cuanto al mejoramiento continuo del proyecto, en concreto la capacitación continua de maestros y coordinadores, lleva un gasto de 50 mil pesos anuales; mientras que el taller de laudería, con la intención de que sean los propios padres de familia quienes reparen los instrumentos y con eso se incentive la economía local, puede tener un costo de 100 mil pesos anuales; y en el caso de la Escuela para Padres, un programa formativo integral para las familias, se invierten 100 mil pesos por año.

Finalmente, a futuro se piensa construir el Centro Cultural Comunitario Regional, el cual podría tener un costo aproximado de tres millones de pesos.