Murales sí pueden rescatarse en lugar de demolerse: artista

MORELIA, Mich., 6 de febrero de 2024.- El discurso de que no se puede hacer nada para rescatar una obra pública como un mural cuando hay una demolición, puede echarse abajo, indico a Quadratín Mizraím Cárdenas, artista visual que ha realizado una gran cantidad de obras públicas en Morelia. Él enfrentó esta situación y logró rescatar un mural de su autoría.

El artista contó que el año pasado tumbaron un mural que había hecho en el Holiday Inn Express. Este mural estaba realizado en mosaico, y lo que hicieron ahí fue rescatar por primera vez un mural de mosaico en un espacio, y junto con Daniel Lázaro, un arquitecto con el que trabaja la colocación de obra artística pública, pudieron salvarlo.

Sobre este tema, Daniel Lázaro, arquitecto de profesión, contó que para salvar el mural, lo que hicieron fue buscar la manera de desprenderlo. Mide 3.30 por 2.20 metros, y aseguraron la parte de frente donde está todo el mosaico y fueron rebajando el muro por atrás.

Los arquitectos de la obra en ese hotel lo iban a eliminar, iban a remodelar el lugar, entonces vieron que era una obra del maestro Cárdenas y fue que lo contactaron para ver la posibilidad de poderlo mover, porque lo suyo era demoler todo, explicó el arquitecto.

Entonces revisaron cuáles podrían ser las maneras para salvarlo, les pidieron un presupuesto, lo pensaron mucho, pero después encontraron un donante que pagaría la maniobra y se quedaría con el mural.

El costo de esta acción fue de aproximadamente unos 50 mil pesos en total, lo que incluyó desde quitarlo, armarlo, traspasarlo al nuevo espacio y dejarlo instalado en el espacio de un particular, que ya se quedaría con la obra.

En el transcurso de poder hacer todo este trabajo vinieron algunos problemas más, explicó el arquitecto, porque los arquitectos del hotel siguieron su remodelación, y se tuvo que sacar el mural por una ventana, lo que fue un verdadero asunto, pero finalmente se logró el objetivo.

Esto implicó tres semanas de trabajo, porque estuvo que rebajar, explicó Mizraím Cárdenas, y proteger el frente con todo lo que se podía, pegamentos, tela, y por atrás ir trabajando hasta llegar al azulejo para poderlo sacar de ahí. Después generarle otra estructura y después generar una estructura para colocarlo en el espacio.

“Fue todo un trabajo interesante en cierto sentido. Con esto nos damos cuenta de que ese discurso de que no se puede hacer nada con la obra cuando se va a hacer una demolición, pues no es cierto, sí hay manera de rescatarlo”, refirió al artista visual.