MORELIA, Mich., 4 de mayo de 2018.- “Este libro ha sido una pesadilla”, confesó la pintora Soledad Tafolla en la presentación de su libro este jueves en la Biblioteca Pública Central de la Universidad Michoacana(UMSNH). La artista manifestó que en algún momento estuvo a punto de darse por vencida de realizar el proyecto.

Al ser entrevistada, Soledad Tafolla dijo que ya ha tenido dos presentaciones; una en Uruapan y otra más en Pátzcuaro, “la que sigue es la de Colima y después en México habrá una chiquita”, explicó.

Tengo una caja llena de tiliches escritos, y me decía la editora ‘coge esa pinche caja y saca, que se escaneé todo y me lo mandas’. Duré dos meses con una secretaria que al último estaba más mensa que yo, ¡puro sufrir!”, se quejó.

Reiteró que fue una pesadilla porque todos estaban histéricos: el editor, el impresor, el diseñador y la que corrige el estilo, por lo que dijo que estuvo apunto de decir que ya no quería un libro, porque lproblemática de hacer un libro duró un año.

En cuanto a la distribución, dijo que iba a buscar mover el libro el cual costaría 500 pesos al público. Explicó que buscará lugares como librerías de Gobierno del estado y en algunos otros lados más, sin especificar.

“Yo no inventé hacer el libro, me empujaron las circunstancias”, expuso y aseveró que le iban a hacer el libro desde la Secretaría de Cultura de Michoacán, “y cuando dije: ‘hágalo’, me dijeron: ‘bueno, no hay dinero!’ ¡Chingao! entonces para qué dicen que me van a hacer el libro”, contó.

Entonces fue a Ciudad de México y le contó a sus amigos, “uno era impresor y su esposa era editora y dijeron ‘si tienes tantos coleccionistas, tanta obra por tantas partes, diles que den dinero y hacemos el libro, yo lo imprimo al costo”, le dijo el editor.

Dijo que entregó 28 cuadros por el dinero que le dieron los coleccionistas y con eso se pudo hacer el libro, ecual tiene alrededor de 200 imágenes de obra que se encuentran en colecciones privadas, “hay una señora del libro que tiene 4y tantos cuadros, se llama Nora Calderón y es de Monterrey, ella tiene vicio de mis cuadros, por eso los compró”.