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MORELIA, Mich., 21 de noviembre de 2016.- Se realizó, la tarde de este lunes en el Teatro Ocampo, el concierto de Romain Leleu y el Ensamble Convergences, como parte de las actividades del Festival de música de Morelia (FMM), en su vigésima octava edición.
Una vez que interpretaron los dos primeros temas, entre ellos Aguas de marzo, “la mejor canción brasileña de todos los tiempos”, señaló Leleu, el trompetista saludó al público con un español deficiente, pero entendible; cumplió lo dicho en una rueda de prensa horas atrás: hablaría en español.
Explicó al público que el recital, llamado Inspiración, estaba también llamado a traer vivencias y descubrimientos en su experiencia musical.
Indicó que a muchos de los compositores de este programa les sigue desde hace mucho tiempo, “pero no solo son los antiguos”, dijo, y explicó que un acordeonista amigo de ellos, Vincent Peirani, les compuso Random obsession, así que se dispusieron a tocarlo, y con ello cerraron la primera parte del programa.
Para la segunda parte, y con el escenario nublado por el hielo seco, el ensamble interpretó el tema de Cinema paradiso, autoría de Ennio Morricone, para después seguirse con un tema de Antonio Carlos Jobim, Chenga de saudade.
Vino entonces la Mañana de Carnaval, de Luis Bonfa. En este tema, Leleu le dejó el escenario al Ensamble Convergences.
Después regresó el trompetista, que junto al contrabajista interpretaron una pieza triste, melancólica, que casi terminó con un ‘fade out’ acústico y visual: La oración del torero, de Joaquín Turina, que en su esforzado español, el trompetista explicó que era la oración de un matador de toros, previo a salir al ruedo.
Para el final, cerraron con Fuga y misterio, del argentino Astor Piazzolla, y como el público seguía aplaudiendo, el ensamble cerró con dos temas más: el de una película, Orfeo negro, y una pieza rumana.