Tin Tan, pachuco, cantante, bailarín, que capturó esencia del ser humano

MORELIA, Mich., 22 de septiembre de 2015.-En una noche donde todos se tornaron un poco pachucos, un poco bailarines, un poco cantantes y un poco vagabundos de buen corazón al compartir el legado del cómico Germán Valdés, fue inaugurado el homenaje Tin Tan: 100 años, en la Cineteca Nacional.

En la Sala 8 Ismael Rodríguez, amigos del actor, familiares y hasta admiradores vestidos con sacos largos y sombreros con plumas, presenciaron la ceremonia donde estuvieron presentes Alejandro Pelayo, director de la Cineteca Nacional; el investigador Jorge Rivero Mora, quien realizó la tesis doctoral Wachando a Tin Tan: análisis historiográfico de un personaje fílmico, así como Rosalía Valdés, hija de Germán Valdés.

Alejandro Pelayo  afirmó que Tin Tan es una de esas figuras que han pasado de generación en generación conquistando nuevos públicos y presentó durante el homenaje un documental televisivo dirigido por él mismo, con testimonios de  figuras de la cultura mexicana como Silvia  Pinal o el pintor José Luis Cuevas, quienes coincidieron en que la figura de Tin Tan capturó la esencia del ser humano y la identidad del pueblo mexicano.

El investigador Jorge Rivero Mora, quien además de su tesis doctoral es autor del texto Tin Tan nuestro siempre joven centenario, afirmó que este cómico estuvo siempre arraigado a nuestra identidad y fue un personaje que por su naturaleza honesta y desenfadada estuvo siempre alejado del poder y los beneficios políticos,  aspecto que plasmó en muchas cintas como El rey del barrio.

“Fue un personaje puro de la cultura popular. Los efectos de la risa y la empatía con sus personajes son instantáneos. Es lamentable que en los círculos académicos no se abra mucho la puerta a  la discusión de un personaje como éste, que pertenece a una época de  discursos disímbolos y a la cual llegó a poner su grano de arena como un remolino”.

Rosalía Valdés, hija de German Valdés Tin Tan, dijo que la gran pregunta ha sido siempre el porqué Tin Tan no se internacionalizó, aunque dijo, existe actualmente una gran influencia de sus películas entre la comunidad latina que vive en los Estados Unidos,  donde personas de todas las generaciones, niños y adultos, lo recuerdan con mucho cariño.

“Recuerdo que mi papá decía que lo que más le agradaba de su trabajo era escuchar la risa de los demás y por eso hacia su trabajo con todo el gusto. Él estaría muy alegre de ver la permanencia que ha tenido su obra entre su gente, entre los mexicanos”.

La hija de Germán Valdés Tin Tan recordó que ella estuvo presente a los siete años cuando su padre realizó el doblaje para los estudios Disney del oso Balú, para la cinta El libro de la selva, y recordó de aquellas sesiones musicales la frase de una de las canciones que decía: “La naturaleza te lo da”.

“Esa letra lo definía, eso era él, un hombre al que la naturaleza le daba toda su gracia, su comedia, su actitud.  Tin Tan nunca fue un hombre de apariencias sino de arte, y para mí,  como su hija, el mejor papel que interpretó en la vida fue el de ser un gran padre”.

Después de la ceremonia el público recorrió la exposición en torno a la filmografía de Tin Tan que fue montada en los vestíbulos de las salas 1, 2 y 3, donde pueden encontrarse stills de sus películas, acompañadas de algunas de sus frases más famosas como: “Perdóname Beethoven, perdóname Chopin, pero con el tumbao me tengo que menear”, “Yo solapa me echo ese trompo a la pezuña”, o “Mangazo ¿qué tal si agitamos las ancas y paseamos al Cayetano?”.

De forma paralela al ciclo que iniciará en octubre en la Cineteca Nacional con las principales cintas de la filmografía de Germán Valdés Tin Tan, la plataforma digital FilminLatino (www.filminlatino.mx) del Imcine, celebra al cómico ofreciendo en su catálogo Ni muy, muy… ni tan, tan… simplemente Tin Tan, de Manuel Márquez, en el que se reúnen 31 entrevistas a familiares, compañeros de actuación, amigos cercanos e investigadores sobre la figura de este personaje tan querido por los mexicanos.