Jorge Luis Borges, un gran renovador de la literatura

CIUDAD DE MÉXICO, 30 de marzo de 2016.- La conmemoración del 30 aniversario de la muerte de Jorge Luis Borges (Buenos Aires, 24 de agosto, 1899-Ginebra, 14 de junio, 1986) iniciará en nuestro país en abril y contará con la presencia de Roberto Alifano, el amanuense del escritor argentino, quien realizará diversas actividades en las ciudades de México y Tijuana.

Según un comunicado, lecturas poéticas, conferencias y debates son parte de las actividades programadas en honor de Borges, de quien Alifano aseguró: “era un ser esencialmente literario. Un hombre que encontró la literatura y a partir de ese momento sus aportes fueron esenciales en todo sentido, principalmente porque Borges era un hombre de genio”.

El acercamiento que Roberto Alifano tuvo con Borges inició a través de sus lecturas, después pudo conocerlo y trabajar a lo largo de 10 años con el autor de El aleph y Fervor de Buenos Aires, a quien calificó como “una persona realmente encantadora, un hombre amable, con mucho sentido del humor, un hombre extraordinario para conversar”.

El mundo se alista para este año conmemorar el 30 aniversario luctuoso de quien es considerado el escritor argentino con mayor proyección universal, cuyas posturas políticas le impidieron ganar el Premio Nobel de Literatura.

Y es que el universo de Borges fue la literatura, pues ahí, dijo el escritor argentino con 50 libros en su haber, es donde aporta todo su genio para incluso renovarla. “En el arte, esencialmente el sentido se da a través de las formas y Borges es un hombre que siempre estuvo dedicado a las formas literarias y en esa dirección, digamos, sin ser un escritor de vanguardia, podemos decir que fue un gran renovador de la literatura”.

Según Alifano, nominado este año para el Premio Cervantes de Literatura, Borges era ante todo un poeta “que deja una obra extraordinaria, porque inclusive la prosa de Borges es poesía, es profundamente poética”.

Por ello, a 30 años de su fallecimiento, el amanuense de Borges consideró que es fundamental leer y releer al autor de libros como Elogio de la sombra y Los conjurados, y para esta conmemoración Alifano ya tiene una agenda llena que incluye actividades en Argentina, México y algunos países europeos, como España, Italia y Alemania.

En nuestro país, Roberto Alifano visitará el Centro Cultural Tijuana, donde el miércoles 6 de abril ofrecerá una lectura en voz alta de una selección de textos de dos grandes autores del siglo XX: Jorge Luis Borges y Pablo Neruda.

En este acto, comentó el especialista argentino, se centrará en los sonetos de Borges que son sus favoritos. “Hay uno que me parece espléndido que se llama Everness. Sólo una cosa no hay. Es el olvido / Dios que salva el metal salva la historia / y cifra en su profética memoria / las lunas que serán y las que han sido” y que incluso es una especie de clave entre él y el Papa Francisco, pues cuando se ven lo recitan de manera conjunta.

Mientras que el viernes 8 de abril dictará la conferencia El Borges cotidiano, donde hará un retrato de la vida diaria del escritor con quien trabajó “10 largos años”, sobre todo en traducciones como las deLas fábulas de Robert Louis Stevenson, la poesía de Hermann Hesse y algunos relatos de Lewis Carroll.

“Diría que todo lo que editó Borges en esos últimos 10 años pasó por mis manos. Tuve el privilegio, sin ninguna duda, es un don que le debo a la vida”.

El Centro Cultural Tijuana también inaugurará la exposición Borges inédito, integrada por 25 fotografías tomadas por Rogelio Cuéllar durante la visita del escritor argentino a México en 1973, el 90 por ciento de las cuales son inéditas.

En la Ciudad de México, Roberto Alifano estará el día 13 de abril en la Capilla Alfonsina, “la casa de don Alfonso Reyes, a quien lamentablemente no llegué a conocer, pero de quien soy un muy buen lector.

“Voy a tener un diálogo con el maestro Adolfo Castañón, que es uno de los grandes especialistas que tiene México dedicado a don Alfonso Reyes, que sí fue muy amigo de Jorge Luis Borges, se conocieron aquí, en Buenos Aires en 1927, cuando don Alfonso Reyes llegó como embajador de México a la Argentina”.

A la par de estas actividades, el último amanuense de Borges alista un libro que se llamará Francisco y la literatura, a partir de conversaciones con el Papa que, dijo, es un gran lector de Borges y Fiódor Dostoyevski, y a quien conoció cuando el entonces sacerdote Bergoglio visitaba seguido a Borges, siendo profesor de literatura y tenía una materia dedicada a la poesía de Jorge Luis Borges.

Y es que es prácticamente imposible pensar la literatura del siglo XX sin el escritor argentino, creador de una cosmovisión muy singular, sostenida sobre un original modo de entender conceptos, como los de tiempo, espacio, destino o realidad.

Sus narraciones y ensayos se nutren de complejas simbologías: ontologías fantásticas, gramáticas utópicas, matemáticas imaginarias y genealogías sincrónicas que ofrece con una poderosa erudición, una perfección de lenguaje, originalidad en sus ficciones y belleza en su poesía.