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MORELIA., Mich, 17 de octubre de 2014.- El director Alejandro González Iñárritu, quien estrenó su película titulada Birdman en la doceava edición del Festival Internacional de Cine de Morelia (FICM), comentó sentirse honrado al inaugurar el festival con el largometraje que realizó el año pasado con mucho cariño en la ciudad de Nueva York.
En rueda de prensa para dar a conocer más detalles respecto a la creación de la misma, el cineasta comentó que “para mí es un privilegio estar aquí, no solamente porque me encanta este estado, me encanta esta ciudad y amo a mi país, el presentar mí película en mi país me pareció muy importante, por eso volé desde Calgary donde estoy filmando mi más reciente proyecto”.
Para Alejandro Iñárritu, Birdman es una película que explora la naturaleza de la identidad, a ello su creador externó que: “en la época que vivimos actualmente, hemos empoderado a los demás a decirnos quienes somos, creo que siempre ha tenido ese tema muy presente en todos los seres humanos y más en las celebridades, artistas y figuras públicas, en la época de ahora en donde existen tantas redes sociales y se tiene tanta necesidad de validación de todo mundo, lo cual se ha convertido en una enfermedad en toda la sociedad, ese elemento que nos hace vulnerables o que nos dicta esa necesidad se llama ego”.
Respecto a la actuación del personaje principal que interpreta Michael Keaton, González Iñárritu comentó que desde un principio tuvo en claro que Keaton es de las pocas personas que podía abordar el drama y la comedia, hacer transmisiones invisibles entre lo chistoso, raro, trágico, tonto, superficial, absolutamente profundo yloco, lo que hizo que fuera la razón principal para que el papel protagonista fuera suyo.
Birdman representa para su creador algo muy personal, en el sentido de que fue para él una oportunidad de explorar mi propio ego en lo que expresó, “me parece que todos los seres humanos en ese sentido somos patéticos y adorables, creo que no existe alguien que no necesite la validación, el problema creo yo, es el estar consciente y alerta de esa voz, que la considero uno de los grandes peligros del ser humano a la cual han sucumbido dictadores y mucha gente que ha hecho y se ha hecho mucho daño al hacer caso de esa voz insaciable. En cuanto a mi proceso creativo, considero que no solo es un pájaro, sino un ave de rapiña en donde siempre está inconforme con lo que hice, ese proceso que creo que todos los seres humanos tenemos de auto juicio, lo cual me ha sido muy interesante oírla y observarla, cosa que causó el principio de esta película”.
Alejandro González Iñárritu en la película Birdman, no pierde el humor que lo distingue como todo buen mexicano y realiza un pequeño homenaje a los tamaleros en las últimas escenas de la película donde se aprecia a un vendedor de tamales en el Time Square.