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MORELIA, Mich., 9 de enero de 2016.- Pese a su acervo de más de 19 mil libros de alrededor de 11 mil 500 temas, la Biblioteca del Congreso del Estado es poco conocida y utilizada ya que sólo unas 13 personas acuden diariamente a ella en busca de conocimiento.
Tal vez porque es especializada en temas jurídicos y de historia, pero cuenta con colecciones impresas que datan de 1834, con leyes y decretos federales de 1821 y con actas del Constituyente de 1857, que despiertan la curiosidad hasta de quienes no son abogados o historiadores.
Ahí se encuentra también un archivo histórico del Periódico Oficial del Gobierno del Estado desde el año de 1867 así como del Diario Oficial de la Federación a partir de 1927, los cuales se pueden consultar físicamente ya que todavía no se digitalizan, aunque entre los planes que se tienen está hacerlo, informó el jefe del departamento de la biblioteca, Pedro Ortega Barriga.
El funcionario explicó que tanto por su antigüedad como por su uso, esos documentos requieren de un trato especial para poder conservarlos en las mejores condiciones y estar disponibles para consulta, como el uso de guantes de látex y cubre bocas que proporciona el personal de la biblioteca, sin costo alguno.
Aunque se cuenta con un área para restauración de los ejemplares del acervo, actualmente no está en funcionamiento por falta de insumos, comentó con cierta congoja Ortega Barriga.
Pero no solo hay una amplia bibliografía jurídica e histórica, también hay un área en la sala de consulta con computadoras y servicio de internet para consultar lo que se desee, excepto páginas pornográficas.
En la pequeña casa, ubicada en Aquiles Serdán 72, atrás de lo que fue el Palacio de Anzorena, ahora sede del Poder Legislativo se pueden consultar recopilaciones de leyes y decretos realizadas por los prestigiados historiadores Amador Coromina y Xavier Tavera Alfaro.
Miles de libros sobre derecho Procesal Civil, Penal, Constitucional, Internacional, Electoral, de Aparo, Internacional y Agrario y, desde luego, todas las constituciones leyes, decretos y reglamentos desde 1824 a la fecha.
Es por eso que a pesar de lo especializada que puede parecer, no hay un perfil definido de los usuarios y lo mismo pueden acudir niños que cursan quinto o sexto de primaria para documentar sus tareas que investigadores.