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MORELIA., Mich, 17 de diciembre de 2014.- Aparentemente, el Programa de Desarrollo Cultural Municipal es uno de los que ha funcionado de manera precisa, al menos en Michoacán, de acuerdo a lo dicho por Carlos García Martínez, director de capacitación del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta)
El funcionario fue iniciador del programa en Michoacán, allá por 2012 “yo coordinaba la zona centro occidente, ahora estoy en la dirección de capacitación, he hecho una revisión a ojo de pájaro a cómo es que el programa ha funcionado, fue un cambio de paradigma”.
Esto último debido a que, como señaló el funcionario federal, “al inicio los promotores llegábamos a las comunidades y tratábamos de identificar bajo nuestra óptica cuales eran las problemáticas, el paso del tiempo nos hizo ver que no era la fórmula correcta, los más indicados para identificar sus problemáticas eran precisamente los ciudadanos; ese cambio hizo una nueva política cultural”.
Agregó han hecho un recuento de lo aportado por el Conaculta, el estado y los municipios para el programa, que en los primeros seis años fue “entre 10 y 12 millones de pesos, mientras que los otros 6 años ya había sobre los 15 millones, eso implica que el programa va creciendo con aportaciones de los tres niveles”.
Por lo que respecta a Michoacán, dijo que: “el programa tiene varias fortalezas, que es eminentemente ciudadano, no ha habido oportunidad de politizarlo y vaya que es una materia seductora para cualquier político; además, le pregunte a la directora de vinculación con municipios del Conaculta, Amalia Galván, y me dijo que hay tres estados que operan sin problema el programa: Yucatán, Oaxaca y Michoacán”.
En torno a los desafíos del programa, mencionó que: “es necesario mantener el carácter ciudadano, porque hay proyectos muy seductores para cualquier político que rápidamente puede manipular o aprovecharse de ese espacio, creo que mantener la línea ciudadana debe ser prioridad; también hace falta generar mayores materiales de capacitación; otro reto es cómo resolver la dificultad que atraviesan los municipios para comprobar los recursos por las nuevas disposiciones fiscales, ese es un gran problema; otro es aumentar las aportaciones”.