MORELIA, Mich., 20 de junio de 2018.- A la fecha, ningún candidato a la Presidencia de la República ha dado certeza con respecto al apoyo al quehacer científico en México para los próximos 6 años, de lo cual depende su desarrollo económico y social, por lo que urge asesoramiento en materia científica en la política nacional.

Señala un comunicado de prensa que, continuando con el programa de divulgación científica denominado Cafés Nicolaitas: Ciencia al descubierto, que organiza la Coordinación de la Investigación Científica de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, esta semana abordó el tema: ¿Por qué debemos invertir en Ciencia?

Bajo la moderación de la titular de la Coordinación, Ireri Suazo Ortuño, los directores e investigadores Luis Chacón García, del Instituto de Investigaciones Químico Biológicas: Alberto Ruiz Marines, del Instituto de Investigaciones en Metalurgia y Materiales, José Carlos Alejandro Rodríguez Chávez, del Instituto de Investigaciones Económicas y Empresariales, y Ulises Nucamendi Gómez del Instituto de Física y Matemáticas, discutieron sobre la relación entre la política, planes de gobierno y el papel del quehacer científico en México.

No es la culpa de los investigadores el que los gobiernos no inviertan en ciencia, por una parte la responsabilidad radica en la difusión científica entre los ciudadanos, pero la decisión del monto a invertir y su aplicación está en manos del sector político, afirmó Luis Chacón García.

Es necesario que los políticos y gobernantes se asesoren en materia de ciencia, desarrollo e investigación, afirmó Ruiz Marines, ya que en los planes de gobierno no hay una intención trazada de manera clara para fortalecer la actividad y al parecer los políticos carecen de nociones básicas sobre cómo la generación del conocimiento puede fortalecer a un sistema económico.

Ireri Suazo Ortuño, afirmó que luego de escuchar las propuestas de los candidatos a la Presidencia de la República, es lamentable que no se establezca el quehacer cientifico como una prioridad, al igual que en los 3 sexenios anteriores, que llevaron al país a rezagarse en materia de tecnología y bienestar social respecto a otros países que sí avanzaron notablemente como China.

Qué invertir, para qué y cómo, son las preguntas que los políticos no se han planteado en el área de la generación del conocimiento, cuestionamientos claves dentro de las Ciencias Económicas, afirmó el director del ININEE, José Carlos Alejandro Rodríguez Chávez; parece que no han encontrado cómo aprovechar el conocimiento y la importancia de apoyar la investigación sin delimitarla a la generación de patentes o a una aplicación inmediata; ya que en ocasiones se generan innovaciones en materia de ciencia médica o técnica y posteriormente se estudian sus causas científicas.

El proceso de investigación sigue diferentes caminos y no puede garantizarse que la inversión de resultados aplicables, sin embargo, invertir en ciencia, por lo menos el uno por ciento del Producto Interno Bruto, generaría desarrollo; tal como lo muestran países que han invertido hasta el cuatro por ciento: China, Corea del Sur y Finlandia.

Ulises Nucmanedi afirmó que mientras la población no sea educada desde los niveles primarios para cuestionar, tener un pensamiento crítico y dejar de memorizar fechas y tablas de multiplicar, poco se podrá valorar en México el quehacer científico. Es necesario entonces revisar los programas de estudio para incentivar la curiosidad, la iniciativa por buscar el conocimiento, para que sea valorada en su justa medida la generación de conocimiento propio.

Los participantes afirmaron que no existe un código de ética en la generación del conocimiento, ya que puede ser aplicado para la guerra o para el desarrollo, como en el caso de la energía nuclear; sin embargo toca a la clase gobernante el poder determinar cómo y en dónde apoyar la ciencia para aplicar el conocimiento, al tiempo que mantiene la investigación pura, en aras de ser aplicada en un futuro que podría ser hasta 50 años después como en el caso del descubrimiento de las ondas magnéticas en el siglo XIX, que dieron paso a la generación de electricidad, las celulares, la telefonía fija en el siglo XX.

En el marco del 42 aniversario del Instituto de Investigaciones Químico Biológicas y dado que el desarrollo y el bienestar social de un país depende en gran medida de su capacidad de investigar y generar conocimiento, se concluyó que la toma de conciencia, la difusión de la ciencia y la revisión de los programas de estudio de primaria, secundaria y preparatoria, deben ser materia de atención para el próximo gobierno de México y el Poder Legislativo, además de incrementar el apoyo que hoy es del .4 por ciento del PIB, a por lo menos el uno por ciento.

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