Hay una deuda con los deportistas en reglamento y número: Yarabí Ávila
MORELIA, Mich., 18 de noviembre de 2014.- El clima de tensión crece en las instalaciones centrales de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), y las asambleas estudiantiles de la Facultad de Filosofía y Letras demandan la destitución de cinco funcionarios a los que vinculan con acciones gubernamentales de espionaje en contra de activistas universitarios, reporta la primera emisión del matutino Noticias MVS.
De acuerdo con la periodista Carmen Aristegui, la tensión en la Ciudad Universitaria de la ciudad de México ocasionó que el rector de la máxima casa de estudios, José Ramón Narro Robles, se desplazara a una oficina alterna a realizar sus actividades.
Sin embargo, destaca Noticias MVS, las actividades académicas en todas las facultades, escuelas e institutos se desarrollan sin mayores problemas ni complicaciones.
Con escuelas abiertas y después de haber discutido tanto la situación de los 43 normalistas rurales desaparecidos como de los hechos suscitados este fin de semana en torno a la FFyL, los alumnos –con credencial en mano– exigen garantías de su seguridad física y psicológica y que no se registren represalias académicas en contra de ningún estudiante políticamente activo.
También, cuestionan sobre quién y por qué se ordenó la filmación de asambleas estudiantiles sin conocimiento de los participantes y con qué objetivo.
Los estudiantes de FFyL piden el desmantelamiento del “sistema de cámaras de espionaje y vigilancia ilegal” en la UNAM.
El pasado 30 de octubre los alumnos descubrieron una cámara y un tripie (propiedad de la UNAM) que filmaba desde una ventana de la Torre 1 de Humanidades una asamblea estudiantil para acordar acciones de repudio por los hechos de Iguala, Guerrero.
La memoria del aparato tenía 34 grabaciones que datan desde el 2012 a octubre del 2014, con el registro de diversas reuniones en donde los jóvenes son los protagonistas, aunque también hay encuentros entre estudiantes y funcionarios y 7 filmaciones de actos académicos.
En paralelo, permanecen las barricadas colocadas con mobiliario universitario, tanto en el ingreso al campus de Ciudad Universitaria como en el paso vehicular de insurgentes hacia la FFyL y en la entrada principal de la Torre de Rectoría, donde una decena de personas se ha resguardado detrás de una barrera provisional de hojas de triplay.
La asamblea estudiantil de la FFyL, con algunos de los 14 mil alumnos que han decidido participar activamente en las recientes acciones globales por Ayotzinapa, recordaron que su escuela permanece abierta; este martes 18 de noviembre “la facultad tendrá clases normales, no está en paro, no se encuentra en paro indefinido ni en ninguna situación de esas, insistieron los alumnos de filosofía y letras en lectura de su denuncia ante medios donde no permitieron preguntas.