CIUDAD DE MÉXICO, 23 de abril de 2016.- El diputado Carlos Gutiérrez García respaldó las reformas a la Ley General de Educación, con el fin de otorgar una mayor flexibilidad en la definición de calendarios escolares.

De acuerdo con un comunicado, dijo, “porque consideramos que los alumnos se verán beneficiados al propiciarse una mejor programación de las cargas académicas, además de que se posibilita el fortalecimiento de sus aprendizajes con una mayor eficiencia dentro de su tránsito en el Sistema Educativo”.

Con esta modificación, el calendario escolar de educación básica y normal, tendrá una duración mínima de 185 días y un máximo de 200 días efectivos de clase, y cada autoridad escolar podrá determinar la duración de éste.

En este sentido, aprobamos la reforma “porque reconoce que son los padres de familia, los maestros, y las autoridades locales y federales, quienes en la definición de las actividades y jornadas escolares, reflejarán la circunstancia de nuestras regiones en cuanto a usos, costumbres, condiciones de horario y climáticas, y ofrecerán condiciones de idoneidad para la ejecución de la acción educativa”.

Asimismo, reconoció que se fortalece la participación social en la acción educativa, “misma que posibilita una mejor planeación y gestión del tiempo para la profesionalización del docente, que beneficia la actividad económica de las regiones”, subrayó.

El legislador de Nueva Alianza refirió que los resultados de la más reciente evaluación docente demuestran que las voces que siempre han denostado al magisterio nacional no tienen más argumentos.

“Los resultados obtenidos por el INEE en el 2015 nos indican que el 85% de ellos obtuvo una calificación de Destacado, Bueno o Suficiente”.

En este contexto, destacó que más de 12 mil maestros obtuvieron una calificación de destacado, por lo que el “magisterio demuestra de forma indiscutible que está a la altura de las circunstancias y con el compromiso requerido para alcanzar los fines pretendidos en la reforma educativa”. Añadió que la política pública para la construcción de un sistema educativo debe orientarse al logro de la autonomía de gestión escolar, para así disminuir el abandono escolar, impulsar la eficiencia terminal y propiciar la inclusión y equidad en el sistema educativo, especialmente de los niños y jóvenes en situación de desventaja o vulnerabilidad. “Como representantes electos del Congreso de la Unión, hacemos las propuestas que nos permitan apoyar la normalidad educativa en cada una de las escuelas y planteles que tiene esta gran nación”, concluyó el legislador de Quintana Roo.