Deja producción lechera derrama de mil 833 mdp al año

MÉXICO, DF, 1 de marzo del 2014.- Con la representación del gobernador Fausto Vallejo Figueroa, el secretario de Desarrollo Rural de Michoacán, Ramón Cano Vega, asistió a la presentación del libro “La autosuficiencia lechera en México es posible”, en la cual acompañó a los presidentes de la Asociación Nacional de Ganaderos Lecheros, Vicente Gómez Cobo; del Consejo Nacional Agropecuario, Benjamín Grayeb Ruiz; y de la Confederación Nacional de Organizaciones Ganaderas, Oswaldo Cházaro Montalvo.

De acuerdo con un comunicado de prensa, Cano Vega resaltó la importancia del tema para nuestro estado, debido a que la entidad cuenta con grandes productores de leche, cuyo ganado en el año 2013 generó 344 millones 810 mil litros, lo que representa un ingreso de mil 833 millones 458 mil pesos.

El titular de la Sedru señaló que el municipio de Marcos Castellanos es el principal productor del lácteo en Michoacán, al generar 36 millones 857 mil 670 litros, y le sigue Tarímbaro con 12 millones 160 mil 635 litros.

Por su parte, en el marco de la presentación del libro, el presidente de la Asociación Nacional de Ganaderos Lecheros (ANGLAC), Vicente Gómez Cobo, consideró que es necesario un ajuste de precios a nivel nacional, para favorecer a los productores mexicanos, así como una política lechera que incluya esquemas financieros, créditos competitivos, instrumentos de mercado y programas de compras gubernamentales, para evitar que en algunos años desaparezcan unidades de producción por falta de inversión en la infraestructura.

Asimismo, reconoció que hay avances importantes en el ordenamiento del sector, con Normas Oficiales de productos lácteos que permitirán estar en una mejor situación, además de que con la Reforma Integral para el Campo se tendrán los ajustes para consolidar el sector competitivo.

Finalmente, el presidente del Consejo Nacional Agropecuario, Benjamín Grayeb Ruiz, expresó que hay una necesidad de fortalecer el sector lechero nacional, y de crear las políticas necesarias para alcanzar la autosuficiencia a corto plazo, pues no es posible que la leche de importación se pague más cara que la que emiten los ganaderos mexicanos.