Mente sana en cuerpo sano… con finanzas sanas
MORELIA, Mich., 17 de septiembre de 2015.- Más que una tradición, la venta de alimentos preparados en las fiestas patronales, se ha vuelto una forma de supervivencia para algunas familias michoacanas, las cuales al carecer de estudios han optado por dedicarse al comercio.
Tal es el caso de la señora Virginia García Jiménez, quien afirmó llevar más de 40 años dedicándose a esta actividad, en la cual asegura, comenzó desde pequeña junto con sus siete hermanos con los cuales diariamente participa en las distintas festividades que se llevan a cabo al interior del estado.
Comentó que son alrededor de 24 personas las que dependen de la venta de papas fritas, crepas y hamburguesas, acción que genera una derrama de aproximadamente cinco mil pesos en cada evento.
“Nuestras ganancias varían según la competencia y el lugar en donde vendamos, si bien no tenemos grandes ganancias, se saca para comer ya que vivimos al día”, agregó.
Asimismo, la comerciante mencionó que entre los municipios donde ha participado durante las fiestas patronales son la tenencia de Teremendo de los Reyes, Charo, Indaparapeo, Morelia, así como colonias vecinas, donde señaló se ha registrado una baja en las ventas de hasta un 80 por ciento, la cual atribuyó a la situación de inseguridad que prevalece en el estado.
García Jiménez añadió que la situación para los comerciantes actualmente es difícil debido a la constante alza que se ha tenido en los insumos como es el caso del costal de papa, el cual mencionó actualmente se encuentra por el orden de los 600 pesos, por lo que en caso de llegar a utilizarlo en su totalidad se genera una derrama estimada de mil pesos.
Por último, la entrevistada recalcó la importancia de la participación de los comerciantes en cada una de las fiestas patronales, por lo que externó una invitación a la ciudadanía a consumir estos productos para que de esta forma puedan contribuir con la economía de las familias michoacanas.