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MORELIA, Mich., 17 de agosto de 2017.- El artista visual Marco Antonio López Prado, señaló que se está viviendo una crisis porque se ha ido perdiendo el oficio de dibujar y pintar; “el oficio es algo que debe de ser muy importante en la formación de un artista”, aseveró.
“Curiosamente, después de presentar muchas cuestiones conceptuales y de éstas, llamadas de vanguardia, se está regresando al oficio”, señaló el artista.
Explicó que la antigua Escuela de La Esmeralda, lo que ahora es la Escuela Nacional de Bellas Artes, quitó por un tiempo el oficio de dibujar y pintar, y priorizó las tecnologías. Sin embargo explicó el artista que después de un tiempo se dieron cuenta que eso tiene un límite y que la tecnología va cambiando, “por lo que hay que estarle gastando todo el tiempo”.
López Prado indicó que ya regresaron a trabajar el oficio porque otra vez están los talleres de pintura con las diferentes técnicas, a diferencia de la Escuela Nacional de Artes Plásticas, que es la antigua Academia de San Carlos, lugar en el que, aunque manejaban las tecnologías, siempre priorizó el oficio como una formación de los artistas.
Manifestó que tristemente sí hay una generación de artistas que no tiene oficio, que no sabe pintar y dibujar; “ellos tienen sus argumentos, tienen sus defensas, pero de que ahí está esa generación es indiscutible”, externó, y dijo que cuando se enfrentan a veces a otras realidades ahí se dan cuenta, “te dicen que eso no cuenta, que eso no tiene que ver, pero bueno, es respetable su posición”.
Marco Antonio López Prado expuso que cuando uno domina el oficio, cuando se tiene, puede hacer y deshacer, incluso manejar la tecnología.
Recordó su experiencia como profesor, dijo que había estado dedicado a la docencia por 25 años en la Facultad Popular de Bellas Artes (FPBA) de la Universidad Michoacana (UMSNH), y siempre tuvo compañeros que se fueron por el lado de la tecnología, “que les decían a sus muchachos que ya no dibujaran y que ya no pintaran, yo les decía que debían hacerlo, porque finalmente en un curso de dos o tres meses puedes dominar algún programa para hacer eso”.
El artista remató: “el dibujo, las técnicas de la pintura, son oficios que hay que estar practicando. El dibujo, si no lo practicas, de repente deja de tener una habilidad, entonces es una constancia”.
Relató que el profesor Carmona, quien le dio clases de muralismo, le contaba que José Clemente Orozco, siendo ya el muralista que era, dos o tres veces por semana dibujaba con modelo, y al final de la clase le pedía que rompiera los dibujos. Decía que era un ejercicio de práctica.