Evoluciona el trabajo editorial: se impulsa la perspectiva de género
MORELIA., Mich, 10 de octubre de 2014.- Realizan homenaje a tres grandes maestros michoacanos en la décima edición del Premio Estatal de las Artes Eréndira, aquí una pequeña semblanza de ellos.
En la categoría de Artes tradicionales Emilio López Martínez quien nació en Paracho, Michoacán el 29 de octubre de 1914 ganó el premio Eréndira 2014; bajo la enseñanza de Erasmo López en el año de 1933, Emilio se inició en el arte de aprender a hacer guitarras, después de diez meses se independizo y montó su propio taller en casa, desde entonces hasta hace ocho años se dedicó a hacer guitarras.
La influencia que le dejó Erasmo López lo inspiró a crear su propia escuela taller, lugar donde enseño el oficio a unas 30 personas entre amigos y familiares; algunos llegaron a destacar como fabricantes de guitarras y actualmente muchos de ellos todavía trabajan con la técnica que Emilio les enseño.
Una de las grandes aportaciones del laudero michoacano fue la de crear los adornos de punto de cruz para las bocas de las guitarras, también llamadas rosetas, idea que surgió de la observación de los libros de costura que utilizaba su esposa, pasando estos diseños a la madera, lo que marcó un cambio en la estética de las guitarras.
Don Emi, como también lo conocen en Paracho, ha recibido varios reconocimientos por su labor en Pro de la Asociación de Lauderos por ser un hombre que ha dejado toda su vida a producir instrumentos musicales de gran calidad y belleza.
El ganador en la categoría de Música fue Evaristo Galarza Castillo, originario del pueblo de Purechucho, municipio de Huetamo, Michoacán, nació el 26 de octubre de 1926 y quien siendo todavía un niño, su padre Salvador Galarza le enseñó el oficio de músico, tradición familiar que abarca tres siglos.
Evaristo es todo un personaje en Huetamo ya que durante más de 70 años se ha dedicado a la música, tiempo en el que ha compuesto centenares de piezas como el gusto “El nopiche”, sones como “El medio toro”, valses como “Lazos de amor” y minutes dedicados a imágenes religiosas y angelitos, melodías que acompañan con picardía y romanticismo a los bailarines de tabla de la tierra caliente.
El artesano y músico Evaristo Galarza, actualmente es el único que elabora tamboritas, instrumento que dota de identidad a la música de esta región del Balsas, confeccionándolas con la misma pasión que una obra de arte.
Galarza Castillo actualmente trabaja en la Casa de la Cultura de Huetamo enseñando a tocar violín a niños, jóvenes y adultos.
En la categoría de Danza de los premios, Macedonio Contreras Cuara, ganó el reconocimiento de la presente edición.
Macedonio Contreras es originario de San Juan Nuevo Parangaricutiro, nació el 6 de mayo de 1962, a lo largo de su vida además de bailar la danza tradicional de su lugar natal, la danza de los Cúrpites, se ha dedicado a la enseñanza de la misma.
A la edad de tres años, Contreras Cuara se inició en la danza teniendo como principal motivación a su hermano Jesús Contreras quien también era bailarín y lo preparó con sus demás hermanos para que participara en las tradicionales competencias, es así que a la edad de 13 años participó por primera vez como Cúrpite y en el año de 1974, obtuvo su primer triunfo, de los muchos que ha cosechado a lo largo de su vida.
En la actualidad Macedonio es un maravilloso bailador, quien además se preocupa por la enseñanza de este tradicional baile a los niños y jóvenes de su comunidad.