San Francisco sufrió, pero repitió la dosis a Green Bay

Colin Kaepernick corrió para 98 yardas y comandó la serie ofensiva del triunfo en los últimos segundos del partido para que los San Francisco 49ers derrotaran a los Green Bay Packers 23 a 20, eliminándolos por segundo año consecutivo y consiguiendo su boleto para los Playoffs Divisionales.

El juego del mariscal de los “Gambusinos” estuvo muy lejos de ser perfecto. Kaepernick completó 16 de 30 intentos y lanzó una intercepción que devolvió a la vida a los Packers cuando los 49ers los tenían contra la pared. Pero, recibiendo el ovoide con 5:06 y el marcador empatado a 20, “Kaep” logró consumir el reloj y completar los pases justos para que San Francisco se escapara de Lambeau Field con el triunfo, su cuarto consecutivo ante Green Bay y el tercero en tres partidos de Kaepernick.

Los 49ers se adelantaron con un par de goles de campo de Phil Dawson en el primer cuarto. El equipo de San Francisco, que en los Playoffs Divisionales del año pasado corrieran en 43 ocasiones contra 31 pases, abandonó en apariencia el juego terrestre en una “Tundra Congleada” que, con el factor congelación, los recibía a -22°F al inicio del partido. Esa arriesgada tendencia les cobró factura cuando Tramon Williams interceptó a Kaepernick en territorio de Packers. Aaron Rodgers convirtió el error en seis puntos y revivió emocionalmente a los suyos completando 6 de 7 en una serie ofensiva que culminó con un touchdown de cinco yardas a Jordy Nelson. De pronto el club de Jim Harbaugh, amo y señor del primer cuarto, se encontraba perdiendo el partido.

San Francisco regresó a los fundamentos en su siguiente serie ofensiva, aprovechando una carrera de 42 yardas de Kaepernick para internarse hasta la 10 de Green Bay desde donde Frank Gore corrió para devolver las aguas a su cauce. Los Packers no bajaron los brazos y descontaron otros tres puntos antes del medio para poner los cartones 13 a 10, marcador que se mantendría hasta el último cuarto.

Green Bay, entendiendo la caída precipitada de la temperatura, comenzó a correr más, particularmente con Eddie Lacy. El novato, ideal para la situación tras haber sido el sexto corredor con más yardas tras el contacto en la temporada regular, terminó el partido con 81 yardas y ayudó a llevar a Green Bay 80 yardas en un ataque de 12 jugadas que culminó en un touchdown de John Kuhn que daba la ventaja una vez más a Packers. Los 49ers respondieron de inmediato con otra serie que incluyo una escapada de Kaepernick y culminó con un pase de 28 yardas a Vernon Davis para el cuarto cambio de liderato del juego. Rodgers, ya menos intimidado tras haber regresado de la lesión de clavícula, fue fundamental para marchar a su equipo hasta la seis de San Francisco donde Mason Crosby empató los marcadores pero “Kaep”, de manera a la que nos tiene poco acostumbrados, dio la oportunidad del triunfo a Dawson con su brazo y el pateador no falló convirtiendo de 33 yardas para mantener con vida a San Francisco.

A pesar del valiente esfuerzo de los Packers el peor rival de San Francisco fueron ellos mismos. Con más de 100 yardas de ofensiva total por encima de lo hecho por Packers, los 49ers tuvieron oportunidades para noquear a los “Cabezas de Queso” y no pudieron cerrar la pinza. La presión sobre Rodgers redituó en 4 capturas pero la falta de puntos al ataque mantuvo el partido cerrado hasta sus últimos instantes. Los 49ers tendrán una semana para repensar su estrategia antes de la formidable misión de visitar a los Carolina Panthers, equipo que los superó 10 a 9 en la semana 10 de la temporada.

Los Packers se recuperarán ahora de una temporada plagada de lesiones que se mantuvo andando contra cualquier expectativa. Con lo visto de Rodgers en este partido, y la nueva dimensión que Eddie Lacy le da al equipo, la NFC Norte tendrá un titán en sus manos al menos por el futuro cercano.