Mi sueño era ser futbolista profesional: Dalia Molina

MORELIA, Michoacán, a 5 de abril de 2020.- Dalia Molina es la mayor rompe redes de nuestro equipo, pero el camino no fue sencillo, pero gracias a su constancia y apoyo de su familia consiguió llegar al profesionalismo.

De acuerdo a un comunicado de prensa, Dalia Isabel Molina Chuela, delantera Rojiamarilla, nació en la ciudad de Uruapan, Michoacán, el 9 de octubre de 1999. El gusto por el futbol le nació por su papá, cuando lo acompañaba y lo veía jugar, prácticamente creció en una cancha de futbol afirma.

Uno de los principales obstáculos que Dalia enfrentó en sus inicios fue encontrar equipo: “Empecé a jugar a los 6 años, aquí en Morelia. Desde antes quería jugar pero no había equipos de niñas, en los de niños decían que no podía jugar con ellos por ser mujer”. Más tarde su papás la ayudaron buscar hasta encontrar una escuadra que le abrió las puertas.

A los 12 años, le dijeron que debía buscar un equipo femenil por reglamento de la liga en que jugaba, algo que no la detuvo para mantener su objetivo: “Decidí hacer un equipo en mi secundaria con mis amigas para poder seguir jugando. Al mismo tiempo me invitaron a un equipo de la michoacana, y estuve jugando ahí dos años. Fui a varias Olimpiadas estatales y regionales”.

Al terminar la secundaria recibió varias ofertas de becas en distintas escuelas, y me decidió quedarse en reconocida institución de Morelia. Al finalizar la preparatoria se presentó la oportunidad de las visorías con Monarcas y decidió asistir: “Fue un proceso muy complicado, pero a la vez muy emocionante, porque después de todo ese era mi sueño, ser futbolista profesional. Cuando dieron la lista me sentí súper emocionada, no podía creer que después de tanto tiempo si se reconociera mi esfuerzo, estaba muy feliz”.

La emoción fue mayúscula al saber que jugaría en el Morelos, lugar al que desde niña iba con su familia a apoyar a la Monarquía. Por lo que su primer partido de liga fue muy especial: “La verdad no me lo creía cuando anunciaron que los juegos iban a ser en el estadio. Ya estando ahí pasan tantas cosas por la cabeza, recuerdas esos partido yendo en familia y ahora tu familia yéndote a ver a ti. Ese sentimiento no lo cambiaría por nada”.

Dalia recuerda su primer gol, que dicho por ella misma, tardo en llegar: “Me sentí muy presionada porque iban 10 juegos y no lograba anotar, entonces cuando llegó ese gol fueron muchísimos sentimientos, felicidad, respiré, me quité un peso de encima, lo disfruté”. Con 22 anotaciones Molina es la máxima anotadora de nuestro equipo, algo que la deja satisfecha: “Me siento muy orgullosa, siento que cada esfuerzo a valido la pena, y sé que faltan muchos más por meter”.

Tras 80 partidos de liga disputados, nuestra delantera aún tiene metas por alcanzar: “Quiero calificar a Liguilla, jugarla con Monarcas sería increíble. En lo personal quiero aumentar mi marca de goles, seguir anotando, aportar al equipo y, más adelante, jugar en Europa y en la Selección”.

Molina se considera reservada y disfruta estar con sus seres queridos: “Soy diferente fuera de la cancha, me gusta mucho ver películas, colorear y dibujar, pasar el tiempo con mi familia, salir con mis amigas. Soy muy tranquila”.

Sin duda, Dalia Molina dejará huella en la historia de nuestro equipo femenil y en la afición.