MORELIA, Michoacán, a 31 de marzo de 2020.- Sebastián Saucedo entró en su primer torneo con Pumas para sentir vibrar a CU. El mexicoamericano tomó el balón por la banda izquierda, se perfiló de pierna derecha, y con un disparo sublime logró vencer a Alfonso Blanco, cancerbero de Tuzos.

De acuerdo a un comunicado de prensa, fue su carta de presentación ante la afición universitaria. El refuerzo de los Pumas para el Clausura 2020 llamó la atención, aunque lo que la gente no sabía, es que vivía un sueño. Vestir los colores de uno de los equipos más importantes de México es un paso importante en su carrera.

“Se me puso la piel ‘chinita’. Cuando llegas y ves la cancha, veía alrededor. Es algo muy especial de saber que esta era mi casa. Estoy aprendiendo día a día”, comenta.

Saucedo tiene una historia en particular. Lo que hay detrás del refuerzo universitario es interesante. Es estadounidense por nacimiento y mexicano por adopción. El destino lo trajo a la gran urbe azteca, “es un cambio grande”, dice.

El volante decidió dejar a su familia y amigos para perseguir sus sueños en la Ciudad de México. La Cantera, su nueva casa, es testigo del crecimiento del californiano en la LIGA MX.

“Lo que extraño más (De Salt Lake) es a mi familia y amigos. Tengo algunos que pueden viajar, pero otros son indocumentados y no pueden venir, eso es complicado”, comenta.

“’Michel’ me hace ver el futbol de otra manera; me lo deja claro. Agradezco la confianza y la oportunidad que me dan de salir adelante”.

CONEXIÓN CON EUA

Saucedo no esconde el amor que tiene por los Estados Unidos, país que le dio las primeras oportunidades como futbolista. Desde fuerzas inferiores, el de California fue convocado para la Selección Nacional de las barras y las estrellas.

Su amor es tanto que no pudo jugar con México, país de nacimiento de sus padres. La selección azteca lo convocó para jugar dos partidos amistosos, pero el volante decidió representar al país que desde pequeño confío en él.

“Es un tema muy complicado. Mis papás son latinos, son mexicanos. Pero Estados Unidos me abrió las puertas desde la Sub-14. No quedé para el Pre Mundial de Sub-17, pero ahí pasé al Pre Mundial de Sub-20 y nos fue muy bien.

“Antes de ese Pre Mundial me llamaron de la Selección de México. Sentí que le daba la espalda a Estados Unidos por todo lo que han hecho por mí”, cuenta.

ORGULLO UNIVERSITARIO

En estos momentos Saucedo sueña con el título. Rápidamente se adapta al vestir los colores azul y oro de la Universidad Nacional.

“Con sólo saber lo que ha hecho el club en el pasado, y con el simple hecho de vestir esta playera, es algo muy especial. Estoy jugando en un equipo grande de México. El que tiene una oportunidad así, debe ser honesto con su trabajo”, comenta.