Registra Tigres mayor control de balón en el Clausura 2015

MORELIA, Mich., 28 de marzo de 2015.- En el futbol mexicano no siempre el mejor equipo es el que tiene más tiempo la pelota. Como muestra está el líder Tijuana, que es de los conjuntos que menos minutos promedia con el balón en su poder, pero logra ser muy efectivo al atacar, con 22 goles a favor, principal argumento de sus 23 puntos acumulados.

En cambio, y contrario al mito de que Ricardo Ferretti es defensivo, Tigres es el club que más tiempo tiene la pelota durante los partidos, incluso es el que más remates a portería promedia por encuentro, pero su contundencia apenas le ha permitido marcar en 12 ocasiones y eso se traduce en las 16 unidades que lo tienen en el séptimo puesto de la tabla general.

De acuerdo con las estadísticas que maneja la Liga MX, en este Clausura 2015 el equipo del Tuca Ferretti promedia una posesión de 31.1 minutos por juego; es decir, poco más de un tercio de los 90 de tiempo regular que dura un partido.

En cambio, el Tijuana de Daniel Guzmán se ubica hasta el lugar 14 en cuanto a la tenencia de la pelota se refiere, al conservarla en su dominio 24.3 minutos por encuentro.

Santos es el peor equipo en este rubro, al promediar apenas 22.5 minutos por juego, exactamente un cuarto del total de un partido de futbol.

Pero aquí hay que destacar que de los 10 equipos que tiene más posesión del esférico, solo Chivas (27 minutos por juego) está en los primeros cuatro lugares de la clasificación, pues el líder Tijuana está en el lugar 14 y el sublíder Veracruz en el 12.

Pero no solo Tigres es el equipo que más minutos tiene el balón durante un partido, también es el que más toques le da a la pelota por encuentro (7 mil 286) y el que más pases efectivos realiza (4 mil 567), pero falla en el toque más importante, que es el de mandar el esférico a las redes.

Si por las estadísticas fuera Tigres sería el club dominador en el futbol mexicano, rompiendo el mito de que los equipos de Ricardo Ferretti son defensivos, pero la falta de efectividad en el ataque lo ha relegado a la mitad de la tabla y al tener que batallar por colarse a la Liguilla semana a semana; caso contrario del Tijuana que ha encontrado el equilibrio.

TIJUANA, EL MÁS EFECTIVO

Pese a que no es uno de los equipos que más tenga el balón en su poder durante los partidos, Xolos de Tijuana ha labrado su éxito en este torneo gracias a la eficiencia que tiene en los remates a portería.

Por ejemplo, Xolos es el tercer equipo que más remates a la portería contraria genera. En estos 11 juegos del torneo acumula hasta ahora 72 envíos a la puerta contraria, solo superado por Tigres y Toluca, que tienen 75; sin embargo, la gran diferencia es que Tijuana ha marcado 22 goles producto de este esfuerzo, mientras que los felinos apenas tienen  12 anotaciones y los Diablos 15.

Y el contraste se hace mucho mayor cuando se toman en consideración los remates totales, incluidos los que no van a portería. En ese rubro, Tigres sigue siendo el equipo más dominante con 191 en total hasta la Jornada 11, pero su efectividad se reduce al grado que necesita 15.9 remates para marcar un gol.

En cambio, el líder Tijuana penas ha rematado 152 veces —por debajo de varios equipos como Toluca, América, Pumas, entre otros—, pero con la gran diferencia de que los fronterizos solo requieren de 6.9 remates para anotar un gol.

En cuanto a las llegadas o remates que han recibido los equipos en estas 11 fechas, de nuevo el Tigres del Tuca vuelve a destacar al ser el que menos veces le han rematado, con apenas 101 arribos en contra, de los cuales 37 fueron a portería y 10 se convirtieron en goles.

Aquí de nueva cuenta Tijuana muestra su eficiencia, pues a pesar de que ha recibido 225 remates (incluso es el club al que más le rematan), solo 69 fueron directamente a la portería de Cirilo Saucedo y 13 acabaron en gol en contra.

De esta manera, el equipo del Travieso Guzmán ha labrado la gran temporada que vive en el Clausura 2015, en el que ha demostrado hasta el momento que para mandar en la Liga MX no se necesita acaparar la posesión de la pelota.