Hunde Monarcas a Dorados

MORELIA, Mich., 31 de octubre del 2015.- Entre Ignacio González y Jefferson Cuero, se encargaron de pescar al Gran Pez y cortar la racha de tres juegos sin derrota de los Dorados quienes sufrieron golpe de autoridad por Monarcas Morelia quien los goleó en casa por 4-0 en la Jornada 15 del Clausura 2015 y sumó en su lucha por la salvación.

Sorpresivamente en el once inicial, Enrique Meza mandó a la banca al arquero Cirilo Saucedo y al central Marco Torsiglieri.

Desde el silbatazo inicial, en una fría noche, la Monarquía tomó la batuta del partido al apoderarse del control del esférico con ataque en terruño contrario. Al 4’ el silbante Francisco Chacón anuló una anotación convertida por Miguel Sansores ya que se le marcó una falta inexistente sobre Joshua Ábrego.

Con el transcurrir de los minutos el equipo michoacano continuó con presión en el arco defendido por Luis Ernesto Michel por parte de constantes llegadas de Pablo Velázquez y el mismo Sansores.

El cero terminó en el Coloso del Quinceo y la afición explotó ante el orgullo de lo que representa este partido. Jefferson Cuero llegó a cerrar una pinza a toda velocidad por la izquierda tras un centro de Ignacio González por la derecha al 36’.

De esta forma, se marcharon al descanso con triunfo parcial para los Rojiamarillos.

En la siguiente mitad, rápidamente una vez más la triangulación González-Cuero consiguió agrandar el marcador. Nacho cerró por la derecha mandó centro en diagonal y ante la estirada de Sansores no logró conectar pero llegó encarrerado el cafetalero y ante el achicar de Michel, definió a ras de pasto y de forma correcta, al 47’ el juego se puso 2-0.

Aun vendría más y la recompensa de igual manera al mejor asistente de la noche; Ignacio González, quien cerró pegado al poste derecho y logró empujar la pelota, ahora en esta ocasión, Cuero mandó el centro dentro del área al 51’.

A dos del final, el chileno Rodrigo Chino Millar, formuló una gran jugada individual al quitarse de encima a dos defensores y finalmente disparar a segundo poste de Michel, decretó el 4-0 el último clavo del ataúd en una noche llena de terror para el Gran Pez.