MORELIA, Mich., 13 de diciembre del 2014.- Los planes de los ex monarcas Ábner Mares y Víctor Ortiz se esfumaron en sus últimas contiendas, pues los resultados no fueron los esperados, pero este fin de semana buscarán cambiar el panorama.
Dentro de la cartelera en la que Devon Alexander retará al campeón británico Amir Khan, Ábner y Vicious buscarán recuperar el lugar que perdieron con las derrotas sufridas en sus últimas presentaciones.
“El hambre está de vuelta, encontré la motivación en esa gente que duda que pueda regresar con fuerza, el no escuchar mi nombre como rival a vencer es algo que también me llena de energía para dar todo arriba del ring y retomar mi reinado como campeón mundial, sin importar quién sea el monarca”, dijo en entrevista el tapatío Mares, quien busca reponerse de esa única derrota que sufrió, por nocaut efectivo en un round hace 16 meses a manos del capitalino Jhonny González. Ábner, quien regresó con el que fuera su entrenador al inicio de su carrera, el mexicano Clemente Medina, subirá al ring del MGM Grand de Las Vegas, Nevada para enfrentar al sinaloense José Ramírez, peleador con experiencia de 29 encuentros profesionales.
“Había perdido el rumbo, pero ahora que estoy de vuelta de esta forma, me siento muy feliz y listo para pelear de cualquier manera, quiero demostrar que Ábner Mares está de vuelta, dispuesto a boxear, a cambiar golpes, para lo que sea”, abundó el ex olímpico mexicano que participó en los Juegos Olímpicos de Atenas 2004.
De acuerdo a Milenio, en el caso de Ortiz es una obligación salir del encordado con una victoria, si es que desea alargar su carrera profesional y eventualmente llegar a disputar otro cinturón del orbe.
El californiano de 27 años lleva tres derrotas al hilo, y aún cuando todas han sido ante ex campeones mundiales, su desempeño arriba del ring ha dejado que desear, por lo que un triunfo es forzoso si quiere cumplir el sueño de llegar a ser el mejor boxeador del mundo.
“Mi meta es mantenerme en el peso welter y enfrentar a los mejores ahí, nunca me he ido, solo he cambiado cosas en mi forma de entrenar. Me han preguntando si tengo la necesidad de boxear, no, pero al ¬final del día soy el que toma las decisiones y haré lo que amo. Me puse una meta, ser rey de los libra por libra, uno de los mejores, y sé qué se necesita para llegar ahí”, dijo el peleador que ante Josecito López tuvo una fractura de mandíbula que lo dejó fuera de actividad durante un largo periodo.
Luego de haber sido vencido de forma consecutiva por Luis Collazo, López y el estadunidense Floyd Mayweather, Ortiz, quien llegará con una inactividad de 11 meses y una foja profesional de 29 triunfos, 22 por nocaut, cinco derrotas y dos empates, enfrentará al norteamericano Manuel Pérez en un duelo a 10 rounds buscando ser el verdugo y no la víctima.