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MORELIA, Mich., 9 de octubre de 2016.- Después de una riña registrada la mañana de este sábado en la tenencia de Santa María, los vecinos demandan a las autoridades que intervengan y clausuren una vivienda que es utilizada como refugio de personas adictas, ubicada en la calle Joaquín Pesado, número 10.
Aseguran que no es la primera vez que esto sucede, ya que desde hace años la situación de violencia se recrudece en el lugar sin que haya intervención de la autoridad, ni fortalecimiento de la vigilancia en la tenencia.
El inmueble en cuestión, donde los vecinos afirman que viven jóvenes adictos, se encuentra a un costado del templo; en la fachada se encuentra una lona en la que se lee la frase “Que Dios bendiga a nuestros amigos y perdone a nuestros enemigos”, y “No somos santos, pero tampoco somos narcos”.
Dicha casa es señalada por los lugareños como el lugar donde se reúnen niños y jóvenes a consumir enervantes, cuyos aromas se perciben afuera, y no hay sanciones de parte de la autoridad.
La riña desatada este sábado desencadenó de nueva cuenta la urgencia de las personas por demandar a que el Presidente Municipal de Morelia, Alfonso Martínez Alcázar, los respalde, pues esto no ha ocurrido, de acuerdo con el jefe de tenencia, Wilberth Rosas Monge.
“Quiero hacer una denuncia enérgica, que los ciudadanos sepan y yo asumo la responsabilidad, le he llamado en más de cinco ocasiones al alcalde, le he llamado en más de 10 ocasiones al secretario del Ayuntamiento, Jesús Ávalos Plata, y no me han llamado.
“Hay muchísima molestia, vamos a presentar la denuncia, es falso que haya garantías de seguridad y de paz aquí en Morelia, es una falsedad, a mí me molesta muchísimo que no haya respuesta, le he llamado a los comandantes y tampoco hay respuesta”.
En tanto, los vecinos piden que no se esperen a que haya otra situación similar a la de este sábado, en la que hubo incluso balazos entre grupos rivales en la tenencia.
“Él dice que ayuda en su albergue y ahí hay personas que se drogan, realmente nosotros tenemos mucho coraje porque francamente la gente no quiere dar la cara porque tiene miedo de que algo le puedan hacer, pero no queremos esperar a que un día maten a una persona, vecino de los que vivimos aquí”, aseveró una señora que no quiso brindar su nombre por temor a represalias.
Otra de las vecinas refirió que en esa casa, junto al templo de la tenencia, que hay niños en el sitio y mujeres, pero pese a las denuncias presentadas no se sanciona y afirman que el sujeto, al que solo conocen que le apodan ‘El Roger’, se dice influyente.
“Realmente ya estamos enfadados de eso, queremos que se quite esa casa, es lo que pedimos; ellos según dicen que son buenos pero la realidad es otra, hay muchas cosas ahí, está de lo peor; ha habido denuncias, la casa estaba decomisada por gobierno federal pero se la regresaron”, demandaron los vecinos.