Dialogan de violencias, resistencia y desaparición forzada desde el arte
MORELIA, Mich., 26 de febrero de 2016.- Es viernes, el ultimo de febrero. Por cualquier lado de la ciudad se ven niños acompañados de sus padres, sobretodo de la madre, hay que decirlo. Niños de preescolar, primaria y secundaria que no fueron a la escuela, porque hoy toca Consejo Técnico Escolar.
La Secretaría de Educación Pública (SEP) restituyó, desde el ciclo escolar 2013-2014, la figura del Consejo Técnico Escolar en la educación inicial, especial y básica de todo el país, sean escuelas públicas o particulares. En un documento oficial de la SEP de ese ciclo, utilizado como guía para llevar a cabo los consejos, se destaca que la realización de dichos consejos está orientada a “atender tres prioridades educativas que permitirán fortalecer a la escuela en el cumplimiento de su misión: garantizar una serie de condiciones que promuevan una normalidad mínima en las tareas escolares, la mejora de los aprendizajes en los estudiantes y abatir desde la propia escuela el rezago educativo”
En los centros de trabajo se ven niños esperando a que sus madres, y quizá en alguna ocasión sus padres, terrminen sus jornada laborales y puedan llevarlos a casa. En ruedas de prensa es muy frecuente que en días como hoy, las periodistas tengan que realizar su trabajo mientras los niños permanecen sentados con caras de hastío, aburridos y quizá llevándose alguna galleta de la barra de café.
Para Andrea, madre de dos niños que van a una primaria pública, se le complican mucho los viernes de consejo. Señala a Quadratín que trabaja en la oficina de una empresa, y que aunque no le dicen nada, nota cierta incomodidad, “al final son niños, y son inquietos, me la paso sobre ellos pero veo que a veces mis compañeros como que se molestan y eso me incomoda”.
Juliana, madre de un niño de ocho años, explica que ella no padece los viernes de consejo, porque su marido trabaja en casa y él se queda con el niño, “eso es una bendición para mi, anque él a veces se enoja, le cambia su dinámica que nuestro hijo esté ahí, es demandante”, señala.
En otros casos reciben ayuda, como sucede con Juan, quien afirma que sus suegros les ayudan cuando su hija, de siete años, no va a la escuela por alguna razón, “a ellos les gusta que mi hija se quede ahí, les hace compañía y es muy tranquila, y también mis papás nos ayudan”. Eréndira, quien trabaja todo el día en una oficina del gobierno estatal, tiene que contratar a alguien, “en mi caso estoy sola, soy madre soltera, y pues no me apoyan en casa de mis padres, así que contrato una niñera que me ayuda en días así. Es una gasto que no tenía considerado pero no tengo opciones” explica a a Quadratín la madre de un niño de nueve años.
Al final, la razón de los viernes de consejo obedece a una mejora en la educación, si atendemos a lo dicho por las autoridades en esta materia. Cabe destacar que en este sondeo realizado por Quadratín, en todos los casos que se pudieron observar eran las madres quienes se hacían cargo de los hijos en este día que ni ellos parecen disfrutar.