Reforzarán fumigación para evitar propagación de mosquito Aedes y Culex
MORELIA, Mich., 1 de noviembre de 2015.- Este primero de noviembre el panteón municipal lució abarrotado de gente. Miles de ciudadanos acudieron al cementerio más grande de Morelia a brindar el ya tradicional ritual de abastecer de comida, ‘chupe’ y flores al por mayor a los que se nos adelantaron.
Con motivo de las presentes fiestas, los morelianos, en familia, asistieron al panteón que en este año cumplió 126 años, para recordar a sus parientes, amigos, esposos o amantes.
Los pasillos del panteón de aproximadamente 2 metros de distancia entre las tumbas, se apreciaron llenos, pero no congestionados; pues el tránsito sobre los mismos era el correcto pese a la gran afluencia que se tuvo este domingo en la casa de los muertos morelianos y de algunos otros que pasaron sus últimos días sobre el suelo de la Ciudad de Cantera Rosa.
Rostros desencajados, risas y niños jugando, es lo que se puede apreciar en los alrededores del Panteón Municipal. Todo esto parte de la tradición de celebrar el Día de Todos los Santos; para mañana hacerlo de la misma manera en el Día de Muertos.
“Ya desde hace unos cinco años es menos la gente que viene porque pues por la crisis es difícil venir”, señaló la señora María Dolores Silva Vallejo, tras comentar que la inversión de la ida al panteón entre flores, comida y en algunos casos cerveza, es aproximadamente de 500 pesos por familia.
Sentada en la tumba de su familiar, la entrevistada consideró que la disminución en la afluencia se debe a las complicaciones financieras que existen en el estado; argumento que fue compartido por los comerciantes.
Mientras limpiaba la tumba de su hermano, Liliana Guzmán, precisó que desde hace 24 años ha acudido al panteón el primero de noviembre, pese a ser originaria de Moroleón.
Debido al viaje que tiene que realizar dijo que el gasto que le implica recordar a su familiar es cercano a los 500 pesos, sin embargo, resaltó que para ella es un gasto “necesario”.
Buscando poner en jaque a los elementos de Protección Civil encargados del operativo emplementado, le pregunté sin la grabadora encendida a Arturo Pérez “¿hoy qué se celebra?”, a lo que con fluidez me instruyó sobre las arraigadas tradiciones de los michoacanos.
“El primero se celebra el Día de Todos los Santos; y el dos el de muertos. También se acostumbra que en el primero se recuerden a los niños; y el dos a los adultos que se nos han ido”, dijo a Quadratín.
Conforme avanzaba la charla, Arturo externó que hasta el momento no se han presentado percances de consideración, al indicarme que sólo han atendido los casos más comunes: extravío de niños y atención a desmayados que por situaciones emocionales o por una descompensación, llegan a verse afectados.
Para ayudar a quienes no recuerdan el punto exacto donde se encuentran sus familiares o amigos, -por no ser tumbas muy vistosas o por la inmensidad del terreno- en coordinación con el DIF municipal, Protección Civil orienta a los visitantes, para que no se les pierdan sus difuntos a causa de “mala memoria”.
Al continuar mi trayecto por el recinto mortuorio, en cada rincón se pudieron apreciar familias conviviendo, algunas barriendo las tumbas y otras abriendo los ‘cartones de chela’.
La música casi no sonó en el panteón, debido a que según los norteños y los propios visitantes, el bolsillo “ya no da para tanto”, y es que pese a la importancia del festejo a nuestros muertos, es otra de las fiestas tradicionales que se ha visto mermada por cuestiones monetarias.
Al culminar mi andar llegué con el jefe de oficinas del panteón, Ramón Muñoz, quien con amabilidad me indicó que la afluencia no ha disminuido pese a las complicaciones económicas, pues los morelianos han mantenido una firme tradición en estas fiestas.
Conforme avanzaba a la salida, dijo que pese al operativo implementado, los ciudadanos ingresan con bebidas embriagantes, lo que en ocasiones ha generado riñas entre familiares que “no se llevan del todo bien”.
“Intentamos disminuir el paso de alcohol pero siempre lo meten de contrabando”.
“Ha estado tranquilo, no se han presentado accidentes, espero que mañana vaya a estar igual. Hoy y mañana vamos a cerrar a las 8 y aunque la gente nos pida quedarse les solicitamos que se retiren”, retamó.
Lo oficial
El jefe del departamento de panteones en el cementerio puntualizó que pese a que la afluencia ha sido de aproximadamente 30 mil visitantes, no ha sido la esperada, pues argumentó que las expectativas estaban en que al menos 50 mil ciudadanos recordaran a sus familiares este día en el panteón.
Con relación a la basura que se genera por día desde el 29 de octubre, dijo que son alrededor de 50 mil toneladas las que diariamente 10 camiones retiran del terreno de 16 hectáres.
Uriel detalló que por la noches dos barredoras mecánicas y cerca de 42 elementos operativos realizan labor de aseo en el recinto mortuorio, acciones que, dijo, se realizan de manera cotidiana sin distingos en fechas.
Reconoció que en estas fiestas de muertos las labores se “potencializan”, tras referir que la barda perimetral , por ejemplo, se sanea una vez al año; justamente sobre el mes de octubre.
Al ser cuestionado sobre los percances registrados, dio a conocer que hasta el momento sólo se han detectado dos panales de abeja, los cuales estarán siendo retirados esta misma noche, una vez que el panteón cierre sus puertas.
Otra problemática de insectos que resaltó es la del mosquito de chikungunya, para lo que mencionó se han duplicado las funciones de fumigación, colocando larpicida en cada una de las 35 mil tumbas que existen actualmente.
Así, entre júbilo y desaíres, el panteón lució esplendoroso; con espacios limpios, corredores llenos y la convivencia familiar característica de los morelianos en estas fiestas a nuestros muertos.