Rescatan embarcación varada en el Lago de Pátzcuaro
MORELIA, Mich., 15 de enero de 2019.- El sector estudiantil en Michoacán también se ha visto afectado ante el desabasto de combustible que se registra desde hace poco más de tres semanas.
Retraso en horario de entrada a los planteles y en el tiempo para retornar a su casa son algunos de los efectos que sufren estudiantes ante este panorama.
En un sondeo de Quadratín los jóvenes expusieron que su principal medio de movilidad es el transporte público, mismo que perciben que ha bajado en número de unidades en servicio.
“Yo a la hora de venir a la escuela las combis tardan más en pasar, ejemplo, antes pasaban cada cinco minutos y ahora llegan a tardar como media hora, entonces sí afecta”, señaló la joven Elena Aguilar.
“El desabasto afecta a la movilización de la ciudad, por ello creo que una de las medidas primordiales es empezar a usar el transporte público y cambiar distancias cortas; en el transporte he visto que hay menos frecuencia en el paso de las combis pero creo que se le debe dar prioridad a este sector”, opinó el estudiante Oscar Méndez.
“Se mantiene detenido el movimiento; tengo un primo que tiene complicaciones para ir a su escuela porque tiene que tomar tres combis y afecta la falta de combustible.
“En mi caso lo que yo observo es que el transporte se suele llenar más y uno se tiene que despertar más temprano para llegar si no no llega o las combis que pasan están llenas, antes me hacía20 minutos y ahorita hago más de 35 minutos, por eso me levanto más temprano”, señaló el estudiante Eduardo Saldaña.
Ante ello es que toman medidas como el salir más temprano de casa para compensar el tiempo de espera de las unidades debido a que las que circulan por lo general se saturan, por lo que esperan que la situación se normalice a la brevedad.
“Por ello hay veces que salgo una hora antes porque voy saliendo y la combi ya salió y hay otras que van muy llenas, entonces sí procuro salir con anticipación para llegar al destino a tiempo”, comentó la joven Elena Aguilar.
Si bien el transporte público no ha suspendido el servicio, el número de unidades ha disminuido y estas se saturan, provocando que quienes lo usan deban esperar más tiempo para abordarlas.