En cateo en Villas del Pedregal aseguran narcóticos
MORELIA, Mich., 18 de diciembre de 2014.- El reconocido periodista Ciro Gómez Leyva publicó este jueves en su columna en el diario Milenio, un fragmento de una plática que tuvo con el fundador de los extintos grupos de autodefensa Hipólito Mora, en la cual el también ex policía rural afirma tener miedo de que le hicieran algo a él o a su familia.
A continuación la columna íntegra del comunicador:
Hipólito Mora me llamó a mi celular a las 10:55 de la mañana del domingo. La llamada duró 13 minutos. Después del asesinato de su hijo, el miércoles por la tarde, me autoriza a contar:
Ya ahorita hay bloqueos, señor. En Apatzingán, La Ruana, La Huacana, Uruapan, Los Reyes, Cherán y muchos más. Y posiblemente mañana también, porque no queremos ya al equipo de Alfredo Castillo. Se va a pedir una reunión con el gobernador y el equipo de Enrique Peña Nieto. Si no, seguirán los bloqueos… Castillo quiso que no hablara con los medios. Por eso no voy a hablar con usted mañana en su programa, porque mañana (lunes) habrá una reunión de seguridad en Uruapan. Déjeme ver qué pasa y a la mejor hablamos el martes… Castillo es un tramposo. Anda diciendo que le debo dinero. Deje explicarle. Él me metió arbitrariamente a la cárcel y yo tuve que gastar un millón de pesos en abogados. Le dije que por su culpa yo les tenía que pagar. Y él me dijo: “Yo lo pago, no se preocupe”. Pero del millón, solo dio 700 mil y anda diciendo que me robé lo demás. Me quiere hacer quedar mal ante la sociedad. Además, prometió devolvernos nuestras armas y no cumplió… Muchas veces le dije: hagan las cosas bien, pero aquí siguen asesinando, robando, secuestrando… Espéreme al martes, a ver qué pasa el lunes, a ver si ya se atreven a detener a esa manada de drogadictos… La verdad, tengo miedo, señor, de que vengan por mí o mi familia y nos maten… Todos por aquí me dicen: “Cuídate, Hipólito, te quieren matar”. Y yo no sé ni quién me vaya a matar: los malos, los drogadictos, los federales, los de Castillo.
—Cuídese, Hipólito.
—Ándele pues, señor.