Panóptico
El gobierno de Leonel Godoy Rangel es prácticamente indefendible en todos los ángulos que se le examine.Aún recuerdo las múltiples promesas que hizo en la campaña proselitista que lo llevó a ganar el Solio de Ocampo hace poco más de cuatro años.Transparencia, honestidad, austeridad, participación ciudadana y abatimiento de la dependencia de recursos federales fueron, entre otras, sus palabras favoritas.A poco más de dos meses de terminar su mandato, Godoy Rangel es hoy un cadáver político y muy lejano se ve el día en que vuelva a ser digno de confianza, sobre todo de los michoacanos.¿Qué beneficios tuvo el estado de una relación con el presidente Felipe Calderón que navegó entre la connivencia y la confrontación?Si la pregunta se aborda desde la perspectiva financiera, la respuesta no es otra más que negativa.¿De qué le sirvió a Godoy Rangel reconocer a Calderón Hinojosa cuando hoy Michoacán se encuentra en aguas turbulentas y a punto del naufragio?Y para que al gobernador saliente no le quede duda de que su subordinación al Poder Ejecutivo federal en poco o nada le redituó importantes dividendos al estado, está el tema de la seguridad pública.Que no se sorprenda Godoy Rangel si en los próximos días los medios de comunicación nacionales filtran más información sobre una presunta actitud de condescendencia o pasividad hacia la delincuencia organizada.La Dirección de Comunicación del gobierno michoacano continuará distribuyendo decenas y decenas de boletines exaltando las acciones de la saliente administración.Será un esfuerzo en vano, porque a Godoy Rangel y sus colaboradores nada ni nadie podrá lavarles las caras por tan ineficiente trabajo.Ya veremos si en los próximos días el Congreso del Estado está a la altura de las circunstancias y por primera vez toma decisiones que permitan encarar con realismo y eficacia la difícil situación financiera que hereda Godoy Rangel.***La estrategia del gobierno federal para el proceso electoral de julio próximo está más que anunciada.Si algunos sostenían que el caso Michoacán no se parecería en nada a la lucha política que se avecina en todo el país para renovar la presidencia de la república y las dos cámaras legislativa, hay que leer el último discurso de Felipe Calderón a propósito de su quinto año de gobierno.El presidente de la república advirtió que la delincuencia organizada amenaza la democracia al involucrarse en los procesos electorales del país."La intromisión de grupos criminales en los procesos electorales es un dato nuevo y un dato preocupante, es una amenaza para todos".No dio detalles de sus planes para impedir que los carteles de las drogas intenten manipular las elecciones presidenciales de julio del año próximo.Luisa María Calderón perdió hace poco los comicios para el cargo de gobernador en Michoacán. En proceso electoral, alegó la hermana del mandatario, hubo intentos del crimen organizado por manipular los resultados.Las frases de Felipe Calderón no estuvieron acompañadas de pruebas, quedando en evidencia que con el tema de seguridad pública en general y la lucha a la delincuencia organizada en particular, desde el gobierno federal se trabajará para una victoria del PAN en los comicios presidenciales.La estrategia en Michoacán estuvo a punto de arrojar buenos dividendos, estrategia en la que, por cierto, colaboraron algunos medios de comunicación nacionales y empresas encuestadoras.***En el oriente del estado no fueron pocos los analistas políticos y periodistas que vaticinaron la declinación de la hegemonía de la familia Orihuela tras la detención de Juan Antonio Ixtláhuac Orihuela por presuntos nexos con la delincuencia organizada.Es más, algunos políticos zitacuarenses que hoy buscan acomodo en el próximo gobierno municipal que presidirá Juan Carlos Campos Ponce condenaron y literalmente “crucificaron” al edil priista arrestado sin pruebas de por medio.A poco más de cinco meses de cumplirse tres años del llamado michoacanazo, los pronósticos están lejos de cumplirse. Es más, la hegemonía orihuelista entró en un proceso de renovación más que de extinción.Juan Carlos Orihuela Tello y Eduardo Orihuela Estefan serán integrantes de la LXXII Legislatura michoacana, mientras que Ixtláhuac Orihuela buscará la candidatura del PRI a una curul en el Congreso de la Unión en julio próximo.Algunos inconformes con el liderazgo orihuelista sostendrán que la victoria de Campos Ponce representó un descalabro para dicha hegemonía.No sería un análisis correcto, toda vez que hoy por hoy se sabe que el presidente zitacuarense electo pudo remar contracorriente al interior del PRI local para alcanzar la candidatura, precisamente por el apoyo de Ascensión Orihuela.Aunque Campos Ponce aún no puede zanjar el distanciamiento con Ixtláhuac Orihuela, en círculos políticos locales se afirma que el diputado con licencia sí recibió cierto apoyo de algunos integrantes del grupo orihuelista para vencer en las urnas al panista Carlos Zepeda y al perredista- petista Mario Vallejo.Una muestra más de fortaleza del grupo orihuelista es el caso de Orihuela Tello, quien se alzó con un holgado triunfo en la diputación local.Para quienes piensen que el grupo orihuelista es monolítico habría que recordarles que en un inicio Ascención Orihuela apoyó las aspiraciones de Víctor Silva para hacerse de la candidatura del PRI a la gubernatura de Michoacán.Orihuela Tello no compartió esa decisión y siempre manifestó su apoyo público a Fausto Vallejo Figueroa.El comportamiento del hoy diputado local electo le valió un gran aprecio del hoy también gobernador electo, quien ve en Orihuela Tello un importante aliado en la próxima legislatura.En el caso de Ixtláhuac Orihuela y su paso por la alcaldía zitacuarense, el priismo estatal y local ven un fuerte competidor por la candidatura a la diputación del Distrito III Electoral Federal.Aunque la amarga experiencia del michoacanazo y el desgaste del ejercicio del poder presidencial no se pueden soslayar, el alcalde zitacuarense saliente aún goza de un alto índice de popularidad tanto en el municipio como en toda la región.Una vez que concluya su gestión, habrá de realizar un intenso trabajo para reforzar sus aspiraciones y vencer a probables contendientes al interior de su partido.¿Qué lectura darían aquellos que vaticinaron el fin de la hegemonía orihuelista en Zitácuaro, si Ascención Orihuela llega a ocupar una posición importante en el futuro gobierno de Vallejo Figueroa?